El Gobierno anuncia la inclusión de mujeres solteras y lesbianas en los tratamientos de reproducción asistida con el propósito de "recuperar todos y cada uno de los derechos arrebatados durante la etapa de recortes en el PP", como ha señalado la ministra de Sanidad, Carmen Montón.
El Ejecutivo socialista restablece un derecho que el anterior Gobierno derogó poco después de llegar al poder. En 2012, la por aquel entonces ministra de Sanidad Ana Mato excluía de la cartela sanitaria la fecundación in vitro en mujeres homosexuales o sin pareja, ya que "la falta de varón no es un problema médico". Siguiendo la política de recortes, solo se permitía acceder a las ayudas en inseminación artificial cuando se dieran casos de "problemas de fertilidad". Finalmente, tampoco se incluyeron a las parejas heterosexuales que ya tuvieran un hijo, ni a las mujeres mayores de 40 años.
Los grandes beneficiados fueron los centros privados, que acogieron la demanda de la población desoída por el PP. Algunas clínicas han aumentado más de un 100% el número de consultas sobre este aspecto en los últimos años, con tratamientos que oscilan entre los 2.000 y los 50.000 euros.
Con Montón como consejera de Sanidad de la Comunidad Valenciana la reproducción asistida se devolvió a mujeres solteras y lesbianas, tal y como se hizo en Cataluña, Andalucía o Madrid. Ahora en el Gobierno central, ha tomado la misma medida. Sin embargo, como ella advierte, los plazos no serán los mismos. Por eso pide "paciencia" para llevar a cabo este proyecto. El primer objetivo es revertir la situación actual con un real decreto. Si no lo consigue, tocaría ir "paso a paso".
La tercera de una serie de reformas urgentes
El PSOE sabe que debe darse prisa para modificar en la medida de lo posible los puntos más polémicos implantados por los populares en sus años de mandato. La primera decisión, que se aplicará en apenas un mes, es la de devolver la tarjeta sanitaria a los migrantes 'sin papeles' para recuperar la sanidad universal.
Se aprobará en un real decreto que ahonde en el tema de la Sanidad, y en el que también se reflejará la eliminación del copago farmacéutico para los pensionistas, con un ahorro estimado para los jubilados de 500 millones de euros. Esta segunda reforma llevará "varios meses" hasta hacerse efectiva, pero da buena muestra de los esfuerzos de Carmen Montón por terminar con la precaria situación del modelo sanitario español del último lustro.