Pedro Sánchez y su Gobierno en funciones no admitirán que se rinda homenaje a los presos de ETA en el País Vasco y ha calificado de "inadmisibles" las multitudes que se congregaron para celebrar la salida de prisión de Xabier Ugarte, conocido por ser uno de los captores de Ortega Lara, y José Javier Zabaleta Elosegi 'Baldo'. Así, la Delegación del Gobierno en el País Vasco ha informado a la Fiscalía de los homenajes celebrados en Hernani y Oñate a la llegada de los etarras a sus respectivas localidades.
En el caso de 'Baldo', que fue condenado por múltiples atentados, acusado de asesinato, la reunión y celebración en torno a su salida de prisión causó revuelo después de que las calles de Hernani se llenaran de cientos de nacionalistas que portaban ikurriñas y pancartas plagadas de mensajes de apoyo, que se alzaban al mismo tiempo que se divisaban una multitud de cohetes y vengalas en las manos de los asistentes. Lo mismo ocurrió con el secuestrador de Ortega Lara, Ugarte, que fue recibido en Oñate, Guipozkoa, por la muchedumbre simpatizante que no dudó en vitorear y aplaudir al terrorista, que además estaba presente en la marcha.
Así han estado hoy las calles de Hernani: llenas de gente homenajeando a un etarra orgulloso de serlo. COVITE no descansará hasta que se condene a quienes rindan honores a asesinos en nuestras calles. pic.twitter.com/eBAOLo0qi0
— COVITE (@CovitePV) 27 de julio de 2019
Las acciones promovidas por la izquierda abertzale, condenadas por el Ejecutivo del PSOE, no quedarán impunes y es que no solo se trató de homenajes a terroristas, sino que además los medios de comunicación presentes en el lugar de los hechos sufrieron ataques "en un claro ataque a la libertad de información y de expresión", como fue el caso de Antena 3. "No pueden convertirse en homenajes públicos, en los que se hace un reconocimiento del preso y se legitiman sus crímenes", dicta lo comunicado por el Gobierno de Sánchez, quien también califica lo ocurrido como un "insulto a las víctimas del terrorismo y a la sociedad".
La derecha se suma a la réplica
Si hay algo en lo que últimamente se han puesto de acuerdo Abascal, Casado, Rivera y Sánchez es en condenar las marchas ocurridas tras la liberación de los presos etarras. Los homenajes que tuvieron lugar en el País Vasco han dejado un mal sabor de boca en las filas de la derecha política española y sus líderes han querido apoyar la moción de los socialistas en reclamar control y autocrítica a los abertzales independentistas de izquierda, que históricamente han simpatizado con ETA y su radicalismo.
Asimismo, Pablo Casado, líder de los populares, ha compartido en Twitter un mensaje con el que expresa su rechazo y describe estos homenajes como una "humillación para las víctimas y la democracia", cuya convocatoria tendría que estar ampliamente penada por la ley, con el fin de que aquellos que quieran celebrar homenajes se lo piensen dos veces antes de hacerlo. Su mensaje también ha sido compartido por la secretaria general del PP vasco, Amaya Fernández, y la portavoz en el Ayuntamiento de Bilbao, Raquel González, quienes tildan las congregaciones de "inaceptables e intolerables".
Ahora mismo en #Hernani homenajeando por todo lo grande al sanguinario etarra #Baldo.Sus méritos entre otros: asesinar a cuatro @guardiacivil y un civil en el bar Haizea de Zarautz.La "normalización" de lo anormal en #Euskadi. La exaltación del asesino, sus fines y medios. pic.twitter.com/GAD8XHLgN2
— Consuelo Ordóñez (@ConsuorF) 27 de julio de 2019
Albert Rivera, al que el líder de Ciudadanos Euskadi, Luis Gordillo, también ha respaldado, ha suscrito las palabras del Partido Popular y pretende impulsar una ley con la que poder "acabar de una vez con esta vergüenza", una iniciativa similar a la del Partido Popular.
En otro orden, la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) no se ha quedado sin hacer nada. Pretenden identificar a los responsables de la convocatoria por enaltecimiento del terrorismo y humillación a las víctimas, con una denuncia que ya ha sido presentada ante la Audiencia Nacional.
El de Colectivo de Víctimas del Terrorismo y su presidenta Consuelo Ordoñez también han dado su parecer en Twitter y han denunciado lo ocurrido al grito de "la normalización de lo anormal en Euskadi". Su mensaje hacia las principales agrupaciones políticas de nuestro país ha sido efectivo, pues las fuerzas de los partidos ya estarían haciendo lo posible para frenar esta aberración, según sentencian sus principales líderes. "No hacerlo implica dar alas a quienes buscan imponer su visión intolerante de la realidad", reflexionan en redes.