El Gobierno de la Comunidad de Madrid, presidido por Isabel Díaz Ayuso, estudia una subida en el precio de los abonos del transporte público para, de este modo, poner fin a la reducción de precios aprobada en septiembre de 2022, en el marco del paquete anticrisis.
La consejera de Economía, Rocío Albert, ha explicado que "se está estudiando" incrementar los precios en el transporte público cuestionada por esta posibilidad durante un desayuno informativo organizado por Europa Press.
"Si queremos mantener el nivel de inversión de nuestro metro, uno de los mejores de Europa, y del mundo, si queremos seguir extendiendo kilómetros, tendremos que ayudar a aquellos que realmente lo necesitan, pero a lo mejor parte de la subvención, que fue parte de la pandemia, debe revertirse y utilizarse para esas inversiones", ha afirmado Albert.
"Lo que no se puede hacer es imposibles", ha afirmado la consejera. Madrid, actualmente, no tiene impuestos propios, a diferencia del resto de autonomías y, además, mantiene las tasas más bajas para las rentas más altas, en una política de bajos impuestos de la que ha hecho defensa el Gobierno autonómico.
A pesar de este comentario, todavía no se ha fijado una fórmula concreta, que podría estar vinculada a una progresividad en las tarifas, es decir, diseñar una estructura para que las rentas más altas paguen más por el servicio.
El consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras, Jorge Rodrigo, no descartó esta posibilidad durante el 8 de marzo, cuando abrió a subir las tarifas mediante la introducción de "alguna forma de progresividad" en el sistema.
También en el agua
Junto a este incremento de precios, la Comunidad de Madrid también estudia una subida en el agua, de la que el Canal de Isabel II, después de una década sin subir los precios para penalizar "los consumos ineficientes o suntuosos" y "no esenciales", como "riegos y piscinas".
En el contexto actual, el Canal cree que "la clave para no comprometer el suministro es reducir la demanda de agua por habitante", para lo que apuesta también por la introducción de fórmulas de progresividad que garanticen precios más elevados a las rentas más altas.