Cataluña toma las calles en respuesta al uso desproporcionado de la violencia por parte de los Cuerpos de Seguridad del Estado para impedir el referéndum el pasado 1 de octubre. Los sindicatos mayoritarios, pese a que se suman a la protesta, no lo consideran una huelga general. Sin embargo, las entidades independentistas y las patronales minoritarias Pimet y Cecot sí impulsan este "paro de país" como tal. En el sector privado, algunas empresas han anunciado el cierre para situarse del lado de los manifestantes.
Por su parte, la Generalitat incita la protesta con una rebaja de los servicios mínimos en diferentes puntos y no descontará el salario a los funcionarios. El metro, los autobuses y los ferrocarriles tendrán un servicio mínimo del 25% en hora punta, entre las 6.30 y las 9.30 y las 17.00 y las 20.00, en lugar del 50% decretado el pasado sábado. Durante el resto del día, se cancela el servicio, pese a que el decreto anterior lo fijaba en el 25%.
En los cercanías, los servicios mínimos se mantienen en el 33% durante todo el día. Renfe ha cancelado 151 trenes AVE de larga distancia durante este martes y el próximo lunes 9. Sin embargo, en las urgencias y los quirófanos de los hospitales públicos no habrá paros puesto que se ha decretado un 100% de los servicios mínimos.
Los trabajadores públicos mantendrán su salario
Los empleados públicos que están a cargo de la Generalitat, 200.000 funcionarios en total, podrán asistir a este paro general y mantendrán su salario. Por tanto, tienen permiso para faltar a su puesto de trabajo durante toda la jornada para ejercer su derecho a la protesta. Así lo confirma la web de la Generalitat que ha publicado un comunicado en el que asegura que faltar hoy al trabajo no será tenido en cuenta.
Sin embargo, pese a que se les permita participar en todas las actividades convocadas para la jornada del 3 de octubre, sí deberán cubrir todos los servicios mínimos que afecten a la atención al público en general y que hayan sido establecidos por el propio Govern catalán.
Taula per la Democràcia, una plataforma que engloba una cuarentena de entidades de la sociedad civil, además de ANC, Òmnium y sindicatos y patronales de la pequeña y mediana empresa, ha pedido tanto al sector público como al resto de empresas que permitan a sus trabajadores participar en esta convocatoria de repulsa sin que les afecte en su trabajo.
Empresas públicas como TV3 y Catalunya Ràdio han anunciado que sus trabajadores sí secundarán la "huelga general" convocada por los sindicatos minoritarios.
No es una huelga general
Los sindicatos mayoritarios representados en CCOO y UGT no consideran este "paro de país" como una huelga general puesto que no se trata de una protesta para exigir unas demandas laborales. Sin embargo, otros sindicatos minoritarios sí entienden el paro como una huelga general como CGT, IAC, COS y la Intersindical-CSC, así como asociaciones de la sociedad civil y partidos extremistas como la CUP. Todos están de acuerdo en algo: rechazar la represión policial.
Pese a que las grandes corporaciones no la consideren como una huelga general, se prevé una masiva participación debido al apoyo institucional por parte de la Generalitat, las Diputaciones y la mayoría de los ayuntamientos.
Entre estos consistorios, Barcelona ha querido sumarse al paro cancelando los actos institucionales y cerrando equipamientos que no resulten imprescindibles para el funcionamiento de la ciudad. El Ayuntamiento de Badalona está barajando los resquicios legales para secundar la huelga sin que afecte al salario de sus trabajadores públicos.
Sectores afectados
El sector educativo será el que más paralizado se encuentre durante la jornada. Todas las universidades en Cataluña se han sumado a la protesta y han cancelado toda su actividad para el 3-O. El rectorado de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) asegura que "el uso de la violencia por definición no puede ser nunca proporcionada", alentando a los funcionarios públicos a secundar el paro.
En los institutos también se paralizará la actividad a petición de los sindicatos de estudiantes y la central de profesores Ustec. La Conselleria de Enseñanza ha dado libertad a los colegios para secundar o no la huelga en la enseñanza primaria.
En el sector privado, las empresas pueden secundar la protesta repitiendo las concentraciones celebradas el pasado 2-O para mostrar el rechazo a la violencia frente a los puestos de trabajo o cerrarán en algunos casos durante toda la jornada para sumarse a la huelga. Muchos pequeños comercios cerrarán.
Sin embargo, no todos parecen estar de acuerdo puesto que la patronal de las grandes empresas catalanas, Foment del Treball, se ha desmarcado de la convocatoria afirmando que no tiene cobertura legal, no existe la figura jurídica de protesta política en las empresas y no se ha convocado formalmente la manifestación.