Juan García-Gallardo, vicepresidente de la Junta de Castilla y León ha planteado que esta comunidad sea una "región maternal" para atajar la "emergencia demográfica", donde el apoyo a la maternidad será "una política prioritaria".
El dirigente de extrema derecha se ha referido a las mujeres como "portadoras y dadoras de vida" y ha señalado "su papel fundamental en la sociedad a todos los niveles" en su comparecencia en la Comisión de la Presidencia de las Cortes para exponer su programa de legislatura, del que aseguró que la perspectiva de familia estará presente en todas las iniciativas de la Junta.
Se ha apoyado en el dato de que en 2021 no se produjeron nacimientos en más de la mitad de los municipios de Castilla y León y ha recriminado que haya quienes se lamentan de la pérdida de población mientras fomentan "la cultura de la muerte, con leyes de eutanasia y de aborto libre".
Fomentar la natalidad
Según ha asegurado el de VOX su objetivo será fomentar la natalidad sobre todo en el mundo rural. Para ello, la Junta elevará hasta el 40% la deducción autonómica por nacimiento o adopción en el IRPF y se crearán nuevas ayudas a la natalidad en función del número de hijos, hasta 2.500 euros por cada uno.
También se fomentará la conciliación, al considerarlo pilar fundamental para el cuidado y desarrollo de las familias. Se habilitará para ello un crédito de casi 3 millones de euros, ampliable hasta los 10 millones, a través del Bono Concilia que proporcionará 750 euros por cada menor de la unidad familiar de entre 0 a 3 años.
"Fuga de jóvenes"
García-Gallardo, a pesar de que Educación no es una cartera en manos de VOX, ha hablado también de una "fuga de jóvenes" que salen de Casilla y León a otras partes de España y al extranjero. Quiere tratar de conseguir que la comunidad sea capaz de "retener su talento".
Ha resaltado el objetivo de "garantizar un modelo educativo basado en el mérito, esfuerzo y capacidad dirigido a la excelencia y generador de oportunidades y libre de imposiciones ideológicas, preservando el derecho de los padres a que sus hijos reciban formación religiosa y moral de acuerdo con sus propias convicciones".
Para terminar, y haciendo alusión de nuevo a la Educación, Juan García-Gallardo ha cargado contra las políticas del Gobierno de España: "No permitiremos que el gobierno de Sánchez pervierta a los niños de Castilla y León, con una 'educación sexual' que califican de 'completa' a una edad impropia".