El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, ha llamado a la reflexión sobre si existen "excesivas prestaciones sociales" que llevan a "determinadas personas que decidan instalarse en una situación de precariedad y de dependencia del sector público".
Gallardo considera que se debe pensar cuáles son los motivos por los que "no se encuentra mano de obra" en sectores como el agroalimentario, mientras que hay casi 100.000 empleados en situación de paro.
"Las ayudas sociales excesivas que hay en las sociedades occidentales no ayudan a que los jóvenes tengan un estímulo para salir de determinadas situaciones de dependencia y precariedad vinculadas a estas ayudas del sector público".
Estas han sido sus declaraciones antes de inaugurar el Foro de Industria Agroalimentaria Innovadora del ITACyL, donde ha recordado que existe un "problema" en el sector porque no se encuentran trabajadores.
Controvertido gasto público en partidas de dinero y sin funciones operativas
Al igual que en otras ocasiones, García-Gallardo ha hecho gala de un discurso liberal puro, pero la realidad parece ser algo diferente.
A pesar de cargar contra el sistema de ayudas sociales al considerar que crea dependencia, lo cierto es que su Consejería ha creado un entramado en gastos de personal relevante.
La vicepresidencia, que depende de VOX, y que apenas tiene competencias asignadas en el pacto con el PP, cuenta con una partida de 1.194.770 euros en gastos de personal para la gestión de 112.504 euros asignados en inversiones, tal y como publicó el diario El País.
Las subvenciones que gestiona están relacionadas con el terrorismo. Además, Gallardo cobra un sueldo de 80.741,24 euros anuales, el 70% de la cartera de Vicepresidencia.
A pesar de considerar que "las ayudas sociales no ayudan a tener estímulo", lo cierto es que Gallardo carece de funciones operativas en el Gobierno, aparte de coordinar relaciones entre la Junta de Castilla y León y algunas de las corporaciones de la comunidad, además de representar oficialmente a la Junta cuando falta el presidente, así como en Bruselas.
Gastos en VOX e ingresos de los diputados
Fuera del Gobierno regional, la gestión de VOX también ha saltado a los medios. Entre las polémicas, se encuentra la partida de personal del partido, donde se puede localizar el cobro de 55.148 por parte del presidente de VOX, Santiago Abascal, en 2018. En dicho ejercicio se abonaron 216.243 euros en sueldos para 16 personas en nómina, mientras que en 2017 se pagaron 128.836 euros para seis trabajadores.
Abascal ha continuado en nómina de su partido y en el último ejercicio declaró 37.357,8 euros. Además, hay que añadir que ha cobrado cerca de 685.000 euros de sueldos públicos entre 1999 y finales de 2013, tal y como aparece en el documento mencionado inicialmente.
También destaca el diputado por Toledo, Manuel Mariscal, que cobró 15.896 euros como vicesecretario de comunicación. O el secretario general, Javier Ortega Smith, que ha declarado 23.087 euros en concepto de actividades económicas realizadas y rendimientos obtenidos.