Los funcionarios siempre tienen que salir a desmentir que cobran por no hacer nada o que trabajan muy poco, pero esta leyenda a veces se cumple. Y es que un funcionario de la Diputación de Alicante lleva 15 años sin ir a trabajar pero le pagan por ello.
Según informa el Diario Información de Alicante, este funcionario pertenece al centro psiquiátrico Doctor Ezquerdo y lleva desde 2003 uniendo las bajas laborales con sus vacaciones. Incluso tiene un sustituto fijo para cubrir su puesto como auxiliar de enfermería.
Todos sus compañeros se preguntan cómo ha logrado vivir del cuento durante tantos años, por lo que hablaron del caso en la última junta de personal de la institución pública. Varios de ellos y también representantes de sindicatos aseguran que el funcionario "ha actuado siguiendo un esquema que se repite periódicamente sin que la Diputación y la Seguridad Social haya tomado medidad al respecto", pero no se ha saltado ninguna ley.
¿Cómo lo hace?
Un trabajador puede estar de baja un máximo de 365 días más 180 prorrogables. Este funcionario aprovecha este tiempo hasta que la Seguridad Social le comunica que debe volver a su puesto porque no le considera en situación de incapacidad. Vuelve y solicita las vacaciones que se supone que no ha gastado porque se encontraba de baja, las disfruta y cuando se acaban, vuelve a solicitar la baja. Sus compañeros de trabajo le consideran un "bajista de profesión".
El diputado de Personal, Alejandro Morant, dice sentir "vergüenza" porque la Diputación está pagando un sueldo a alguien que no trabaja y culpa a la Seguridad Social de la situación. Según cuenta Morant al diario de Alicante, la Diputación ha tratado de expedientar al "bajista de profesión" e incluso le llevaron a juicio, pero este ganó. "Le llegamos a abrir un expediente porque tras una de las bajas no se incorporó el día que debía hacerlo, pero nos ganó el juicio porque demostró que la Seguridad Social no se lo había comunicado correctamente", explica.
Esta situación podría haberse evitado si quien controlase el caso fuese una Mutua y no la Seguridad Social. Pero un acuerdo firmado por la Diputación en 1991, por el que los funcionarios que habían obtenido su plaza antes de ese año quedaban exentos del controles de las mutuas en caso de enfermedad, le libra del examen que realizan para asegurarse de que ningún trabajador engañe.
Asimismo, la Diputación ha intentado ir contra el médico de cabecera que firma los partes de baja, pero tampoco lo han conseguido. Además, según expone Morant, el funcionario sube fotos de lo bien que se lo pasa durante sus periodos de baja laboral.
El diario de Alicante se puso en contacto con el protagonista de la historia y asegura que "existen muchas pequeñas cosas que al final se juntan y me impiden trabajar". Y critica que la Seguridad Social le niegue la incapacidad permanente y que le obliguen a trabajar durante seis meses entre baja y baja, aunque no lo cumpla.
En 2011 se realizó un cambio normativo que le obliga a trabajar entre baja y baja durante seis meses. Sin embargo, sus compañeros afirman que en su última incorporación tras estar de baja, se declaró incapaz de trabajar en el centro. Es por eso que sólo se presenta media hora los jueves en la unidad de Salud laboral de la Diputación.
