Apenas dos días después de los atentados en París, Francia emitió anoche un comunicado para informar de que había atacado Raqqa, en Siria, alrededor de las ocho de la tarde. Un total de doce aviones lanzaron veinte bombas y destruyeron los dos objetivos principales: un centro de reclutamiento del Estado Islámico y un campo de entrenamiento terrorista.
La ofensiva se llevó a cabo en colaboración con fuerzas estadounidenses, con quienes venían realizando misiones de reconocimiento de la zona. Raqqa está considerada el epicentro del Estado Islámico y donde el grupo terrorista ha establecido el modelo de ciudad que le gustaría desplegar en el resto de territorios. Desde que la tomaran en 2014, han impuesto normas islámicas, como el velo, donaciones obligatorias y pruebas de conocimiento de la sharia a profesionales. Para ello, el control sobre los civiles de la zona es absoluto, llegando incluso a revisar móviles y amenazar con castigos físicos a quienes no cumplan lo establecido. Del mismo modo, los ejecutados son expuestos en plazas públicas durante días.
El grupo Raqqa Is Being Slaughtered Silently ("Raqqa Está Siendo Masacrada en Silencio") viene informando clandestinamente sobre la situación de la ciudad desde que llegara el ISIS. Con respecto a los ataques de Francia de ayer, no dudaron en condenarlos en su cuenta de Twitter ("es triste cómo todo siempre cae sobre nuestras cabezas. Que Dios bendiga y salve a los civiles de Raqqa") haciendo alusión a que los ciudadanos de Siria son quienes están sufriendo la represión de unos y la respuesta de otros, si bien en otro tweet aseguraron que no había habido ninguna víctima civil tras dichos ataques: "Ningún civil ha sido muerto o herido por los ataques aéreos hasta ahora, de acuerdo a los hospitales de Raqqa".
#Raqqa no Civilian got killed or Wounded by the Warplanes Airstrikes until now according to the #Raqqa Hospitals #Syria#ISIL#ISIS
? ????? ???? ???? (@Raqqa_SL) noviembre 15, 2015
Gran parte de la opinión pública se ha manifestado en contra de esta rápida respuesta armada y considera que esta escalada en la violencia podría desembocar en un conflicto de mayor envergadura. Por su parte, el G20 se reúne en Turquía desde ayer. Entre los países asistentes prevalece la lucha contra el yihadismo, si bien Rusia sigue apoyando al gobierno sirio.