"En femenino sí y en masculino también" fue el lema de cabecera de la contramanifestación al 8M organizada por 'Women of the World'. La concentración celebrada en el centro de Madrid contó con el apoyo de 50 asociaciones, entre las que se encontraban Hazte Oír y Derecho a Vivir. A pesar del apoyo, y aunque los organizadores consideran que fue un éxito total, los datos de afluencia y duración evidencian lo contrario.
La marcha transcurrió desde Ópera hasta Puerta del Sol, y duró apenas 40 minutos. Entre los asistentes se encontraban familias completas, niños a los que se les cedió bastante protagonismo y también personas mayores. Entre todos sumaban apenas 200 personas, todos ellos con carteles que repartió la organización y globos rosas, azules y blancos.
Según publica El Plural, entre la cabecera y el final de la manifestación apenas trascurrían dos minutos y había bastantes huecos entre los protestantes. Eso sí, el ambiente era bastante festivo en general. Solo se produjo un momento de tensión cuando dos manifestantes de enfrentaron a un cámara de TVE para acusar a la cadena de "manipulación". En esta ocasión, un miembro de seguridad tuvo que pedirles que se calmaran.
Respuesta en contra del 8M
Women of the World se ha desvinculado de los partidos políticos a raíz de asociarse la manifestación a las mujeres de VOX. Leonor Tamayo, presidenta de la plataforma, declaró a la prensa que "los hombres son nuestros aliados y compañeros. No son maltratadores. Y la mujer está discriminada hoy por el hecho de ser madre y no por el hecho de ser mujer". Una de las reivindicaciones principales de la protesta fue que las mujeres y los hombres son "iguales en la ley y en derechos, pero diferentes y complementarios".
Para Tamayo, la manifestación del 8M fue un "enfrentamiento entre hombres y mujeres" y por eso se negaron a unirse. Junto a ella, en la cabecera de la marcha se encontraba la escritora y vecesecretaria de Movilización de VOX Alicia Rubio, Gádor Joya de Derecho a Vivir y el presidente de Hazte Oír, Ignacio Arsuaga.
La concentración tuvo el objetivo de exigir "la eliminación de las leyes ideológicas de género que no respeten ni reconozcan la identidad femenina, y la complementariedad de los sexos", "la eliminación de cuotas y discriminación positiva" o "la presunción de inocencia, justicia e igualdad ante la violencia doméstica y justicia implacable para acosadores, violadores y asesinos".
El peligroso discurso
Entre los lemas que se cantaban y reivindicaban, estaban "La diferencia nos complementa", "Viva la familia" y "No al mobbing familiar". Un padre de familia remarcó que estaba allí con sus hijos para que "nuestras hijas tengan los mismos derechos que nuestros hijos, por supuesto, pero sin que se les enseñe que los chicos son su enemigo y para defender un mundo en el que los hombres y las mujeres somos complementarios". Además, unos cuantos niños con huchas recaudaban dinero para los gastos de la manifestación.
En los carteles se podía leer "Más biología y menos ideología" o "No quiero un feminismo de enfrentamiento". Cuando la marcha llegó a Sol, bajo la banda sonora de Piratas del Caribe, subieron al escenario Rubio y Tamayo para leer un comunicado. El discurso de la presidenta de Women of the World comenzó así: "Soy mujer, soy esposa, soy madre y soy profesional. Y no soy feminista".
Uno de los momentos álgidos del manifiesto fue cuando Tamayo expresó: "Quiero ser femenina, plenamente mujer, orgullosa de mis capacidades y mis cualidades y necesidadas de que vosotros, nuestros queridos hombres, seáis masculinos. Hoy se pretende que la masculinidad se asocie a la violencia y la caballerosidad a machismo. Y por eso reivindicamos y celebramos también la identidad masculina". Y concluyó con un mensaje para los hombres: "No dejéis de ser como sois. Os necesitamos masculinos, viriles, caballerosos. Os queremos así y nos gustáis así".