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Se toma una foto diaria hasta el día de su muerte y este es el resultado

Jamie Livingston permaneció retratándose durante 18 años

Un resumen de tu propia biografía en un álbum de fotos. Eso es lo que se propuso Jamie Livingston, cuando en 1979 recibió su primera Polaroid, cuando un proyecto de estas características no contaba con las facilidades tecnológicas con las que contamos hoy en día.

En total, Livingston consiguió reunir un book de hasta seis mil fotografías, en las que retarata durante 18 años todo tipo de acontecimientos cotidianos, y hasta su terrible paso por la enfermedad que le arrebataría la vida con tan solo 41 años: el cáncer.

Ahora, dos de sus amigos, Betsy Reid y Hugh Crawford, han querido abrir una página web en la que han recopilado todas las imágenes con el fin de rendir memoria a su compañero.

1979

Livingston aún estudiaba en la universidad, cuando con tán solo 18 años decidió empezar este proyecto con una fotografía cotidiana en la que se aprecia su vida en el campus. En ella aparece la que sería su primera novia, Mindy Goldstein.

Esta es la primera fotografía del proyecto de Jamie Livingston
"Esta es la primera fotografía del proyecto de Jamie Livingston"

1980

Jamie Livingston aparece con su pareja en varias de las fotografías
"Jamie Livingston aparece con su pareja en varias de las fotografías"

1983

Escenas cotidianas de la vida de Jamie Livingston
"Escenas cotidianas de la vida de Jamie Livingston"

1985

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1990

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1996

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1997, un año amargo

En 1997 le detectan un cáncer y sus fotografías se tornan en una perspectiva más intimista. Con solo 41 años fallecería a causa de la enfermedad y, como puede apreciarse, el testimonio que dejan estas fotos es, cuanto menos, desgarrador:

Durante su estancia en el hospital
"Durante su estancia en el hospital"
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Al parecer, Jami Livingston tuvo una propuesta de matrimonio durante sus últimos días
"Al parecer, Jami Livingston tuvo una propuesta de matrimonio durante sus últimos días"
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Su última instantánea es un amargo relato sobre la crudeza de una enfermedad como el cáncer. Mientras tanto, sus amigos cuidan de la página web como forma de mantener vivo el recuerdo de este fotógrafo que siempre estuvo rodeado de los suyos. En la web animan a que los visitantes comenten qué estaban haciendo el día de cada fotografía. Un relato que mantendrá viva la imagen de Jamie Livingston tras verse obligado a dejar el mundo con tan solo 41 años. 

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