El amor no conoce edad. Y si no que se lo digan a Gertrude, una flamenco de 70 años a la que la vida amorosa no le ha sonreído. O al menos hasta ahora. Y es que Gertrude ha encontrado un flamenco al que saca nada más y nada menos que 33 años.
Gertrude vive en la Reserva Natural de Pensthorpe en Fakenham (Norfolk, Reino Unido), donde ha llevado una vida de fracasos amorosos: siempre tuvo problemas para encontrar pareja. Algo a lo que ha podido poner fin con Gil.
Esta reserva animal está formada actualmente por 62 flamencos. Una cifra que representa los esfuerzos de la organización para fomentar su reducción, ya que en tan solo cinco años, su número casi se ha duplicado. No obstante, en medio de toda esta alegría, el caso de Gertrude era toda una desoladora excepción.
Una historia digna de película
Gil es un flamenco de 37 años que, tras un periodo de coqueteo, ha comenzado una relación amorosa con Gertrude. Y como bien dice el dicho 'el amor no entiende edades'. Gertrude y Gil se llevan nada más y nada menos que la friolera cifra de 33 años. Aún así, su amor ha acabado dando frutos. Literal y figuradamente, ya que por fin la flamenco ha logrado poner un huevo.
La historia ha sorprendido hasta a los propios investigadores del centro. De hecho, la propia reserva ha explicado a través de un comunicado que "los flamencos suelen vivir una media de 30 a 40 años y Gertrude tiene ya 70". De ahí que tanto su longevidad como sus características maternales hayan impresionado de esa forma.
"Los flamencos pueden vivir 40 años y Gertrude tiene 70, por lo que a esa edad avanzada poder mostrar características es asombroso", ha expresado Ben Marshall, director general de la reserva. "Es la primera vez que pone un huevo y probablemente no eclosionará, pero poder mostrar esas características naturales y tener el enriquecimiento de pasar por eso, es increíble", ha añadido.
