La denuncia que presentó Movimiento Contra la Intolerancia contra la quema de una muñeca que representaba a Ana Julia Quezada, la asesina confesa de Gabriel Cruz, en la festividad de La Quema de Judas ya está siendo instruida por la Fiscalía de Delitos de Odio de Sevilla.
La organización presentó ante la Fiscalía dicha denuncia por el "linchamiento" de una muñeca de tela y paja que representaba a una mujer negra, con peluca rizada que simbolizaba a Ana Julia y que fue golpeada, tiroteada y quemada por los vecinos de Coripe (Sevilla). La respuesta del juzgado ha sido, según informa Europa Press, abrir una investigación sobre el caso.
Movimiento Contra la Intolerancia se basa en el vídeo que circula por internet en el que podemos ver cómo se golpea y quema a la muñeca, que fue elegida por los vecinos del pueblo como el personaje más odiado del año. El representante de la asociación, Esteban Ibarra, explicó que presentaron la denuncia porque los hechos "obvian el necesario interés del menor, que ha de ser protegido en todo momento" asegurando que la festividad "fomenta el odio y la violencia hacia la muñeca representativa de la confesa criminal del niño Gabriel y que podrían desarrollarse estereotipos y prejuicios de naturaleza racista, misógina y xenófoba".
Además según la asociación, en el transcurso de los hechos se escucharon expresiones "vejatorias y humillantes que hacían referencia a su condición de mujer negra, jaleando el linchamiento y la violencia ante la presencia de menores".
Los padres de Gabriel condenan el acto
Patricia Ramírez y Ángel Cruz, padres del pequeño Gabriel, recibieron con "frustración, tristeza y pesar" la situación producida en esta polémica festividad. "Nos ha costado un esfuerzo enorme leer la noticia en el periódico y por supuesto no hemos tenido fuerzas suficientes para visionar los vídeos colgados en Internet, asombrados a su vez de que tantos miles de personas pudiesen ver semejante muestra de rabia e indignación", aseguraron en un comunicado remitido a EFE.
"El dolor y la rabia que podamos sentir nosotros por la pérdida de Gabriel es incalculablemente más intenso y doloroso, no pudiendo estar de acuerdo en ningún caso con esta acción, donde la rabia y el dolor mal expresado le ganan la partida al buen hacer y el sentido común", declararon. En este sentido, los padres se pronunciaron "en aras de proteger a los niños de este país y el resto del mundo que de alguna manera han seguido el ejemplo de que la rabia trae más rabia y la crueldad más crueldad".