El rey Juan Carlos I intenta volver a España por todos los medios tras pasar varios meses en el extranjero en mitad de sus escándalos. El monarca intenta regularizar su deuda con el fisco y por ello ha abonado 678.394,72 euros por cantidades no declaradas que percibió de un empresario mexicano, Allen Sanginés-Krause, y que habría escondido hasta ahora a la Hacienda pública.
La Fiscalía ahora está analizando si el pago de este importe, ante la Comunidad de Madrid, la región con los impuestos más bajos de España y calificada como 'paraíso fiscal' para las rentas altas, permite saldar sus problemas con Hacienda y su vuelta al país ibérico.
La declaración ya ha sido presentada ante la Fiscalía, que comprobará si la cantidad satisface el montante del fraude que investiga Anticorrupción desde hace más de un año. Si la liquidación es correcta, la investigación será cerrada en virtud de lo establecido en el Código Penal.
La ley establece que una regulación de las cantidades no declaradas evita la investigación judicial al sujeto siempre que se produzca antes de que le sea notificada la inspección por parte de Hacienda o la Fiscalía, o la Abogacía hayan presentado una querella. Estos supuestos no se han producido, en el caso del rey emérito.
Ahora, la Fiscalía analizará si la declaración presentada por el rey emérito concuerda con lo que ellos han averiguado hasta la fecha y si se da por válida para saldar la deuda estipulada y permitir la vuelta del rey emérito hasta España.
La Fiscalía informó al rey antes de que empezara la investigación en su contra
La Fiscalía ya había avisado al monarca antes de que empezara la investigación en su contra, algo que permitía agilizar los trámites para devolver el importe que adeudaba y evitar un proceso judicial que se avecinaba. Estos trámites se suelen realizar. La Fiscalía, sin embargo, asegura que realizó este gesto cuando ya sabía que existía el peligro de la imputación y afirma que el caso seguirá hacia adelante, ahondando en el origen de la donación recibida por el rey emérito.
Sin embargo, resulta complicado el el delito fiscal prospere si Juan Carlos I resuelve sus deudas con Hacienda antes de que pueda haber cualquier tipo de causa judicial en su contra, algo que ya se ha producido, por lo que el asunto podría no ir a mayores.
