La Fiscalía Provincial de Zaragoza ha pedido 25 años de prisión para Rodrigo Lanza, el radical presuntamente culpable del asesinato de Víctor Laínez, con el agravante de motivos ideológicos porque la víctima llevaba unos tirantes con los colores de la bandera española.
Además, el ministerio público ha solicitado una multa de 150.000 euros para los herederos de la víctima y 5.620,52 euros para los servicios sanitarios por la atención que tuvieron que darle a Víctor Laínez. Esta pena coincide con las peticiones realizadas por la familia de la víctima y por la acusación popular, a cargo de VOX.
El partido de Santiago Abascal decidió interponer una querella en diciembre de 2017, cuando sucedieron los hechos, porque además de ser un delito de asesinato, existía el componente ideológico, pues a la víctima se le insultó llamándole "facha" y "fascista". En su momento, Pedro Fernández, vicesecretario jurídico de la formación, afirmaba que querían garantizar que el crimen se investigara como un delito de odio por parte de la izquierda y no sólo como un acto violento aislado.
El crimen de los tirantes
El ya conocido como crimen de los tirantes tuvo lugar el 8 de diciembre de 2017, tal y como remite el Juzgado de Instrucción número 3 de Zaragoza. El fiscal narra que el supuesto culpable, Rodrigo Andrés Lanza Huidobro Cebollada, entró al bar Tocadiscos acompañado por unos amigos y allí vio a Víctor Laínez.
Lanza comenzó una discusión con la víctima que comenzó por los tirantes con los colores de España y le llamó "facha y fascista". Luego le dijo que "ese era un barrio antifascista, que no querían nazis allí y que no era bienvenido". Después Lanza y sus amigos se marcharon a la salida y Laínez se fue al fondo del local.
Entonces, el supuesto agresor volvió de la calle y asaltó a la víctima por la espalda. "Lanza golpeó fuertemente en la cabeza Víctor Laínez, por lo que éste cayó al suelo inconsciente", relata El Periódico de Aragón. "Una vez en el suelo, le dio una patada en la cara, se colocó encima y siguió propinándole puñetazos en la cabeza, tras lo cual salió del local y se marchó".
Los servicios de emergencia llegaron para trasladar a Laínez al hospital Clínico de Zaragoza, pues se quedó sin consciencia en el suelo y sangrando por los oídos, por la boca y por la parte trasera de la cabeza. Permaneció en la UCI unos días pero falleció el 12 de diciembre. La autopsia reveló que murió a causa del severo traumatismo craneoencefálico que supuestamente le habrían provocado los golpes de Rodrigo Lanza.
