Ya no hay vuelta atrás. A pesar de recular en un primer momento, finalmente Canal Toros echará el cierre definitivo el próximo 23 de marzo después de más de tres décadas dedicada en su totalidad a la tauromaquia, erigida en una de sus patas mediáticas, también en una parte de su negocio.
El cierre de Canal Toros es total, es decir, dejará de emitirse por todas las vías, por lo que el canal y sus contenidos dejarán de poder visualizarse desde el 23 de marzo para todos los clientes, incluidos aquellos que lo contrataron por separado y quienes lo integraron en la oferta de Movistar España. Únicamente permanecerán vigentes los contenidos ya emitidos previamente en la plataforma bajo demanda (VOD) a través del descodificador de Movistar para los clientes residenciales, pero no se actualizarán.
La medida será comunicada a todos los clientes y Movistar ya no cobrará el importe correspondiente desde el 1 de marzo. Movistar indica que "ha hecho la realidad la aventura apasionante de llevar la tauromaquia a todos los rincones, reivindicándola en momentos decisivos en los que muchas ventanas se fueron cerrando, aportando una mayor visibilidad al sector y, no menos importante, incorporando públicos y audiencias que han descubierto el toreo en toda su grandeza y atractivo gracias a este canal".
Diferencias que han abocado al cierre
Movistar justifica el cierre de Canal Toros en que "la nueva situación del mercado y la irrupción de nuevos actores, lamentablemente, hacen que no sea viable la continuidad del canal que ha estado dedicado en exclusiva al sector".
Esta decisión se produce después de que las empresas de Las Ventas, Plaza 1 y la Maestranza hayan alcanzado acuerdos con una nueva plataforma digital pendiente de creación, OneToro, para retransmitir sus temporadas durante los próximos tres años.
Se trata de una plataforma digital que todavía no se ha creado por completo mediante la que se retransmitirán las ferias de San Isidro y Abril, después de no haber alcanzado un acuerdo económico con Movistar.
Las relaciones ya estaban rotas desde septiembre, después de no alcanzar un acuerdo con este canal para la emisión de la feria de Otoño. Después, en la sala de San Isidro, se publicó que los derechos se cederían a OneToro, junto con Telemadrid, para emitir 14 de las 23 corridas, sin posibilidad de contraoferta.
Un período de incertidumbre en la tauromaquia
El cierre de Canal Toros abre mayor incertidumbre para la tauromaquia, puesto que suponía, en cierta medida, una ventana de oportunidad para mostrar esta práctica y conseguir mayor conexión cuando la población española evidencia un rechazo mayoritario, a lo que se unen los años de la pandemia, que han supuesto una paralización completa de los espectáculos.
Según una encuesta de Ipsos Mori, el 84% de los jóvenes españoles se sienten avergonzados de vivir en un país taurino. Si extendemos el estudio a todo el espectro, podemos contar con las cifras del último sondeo elaborado por Sociométrica para El Español en 2019: un 56,4% de los españoles están en contra y solo un 24,7% se muestran a favor.
El mundo de la tauromaquia ha perdido espacios mediáticos durante los últimos años. El único programa especializado en el mundo del toro emitido en la televisión nacional, 'Tendido cero', emitido en La2, tan solo registra medias del 2%, difícilmente sostenibles en una televisión privada. Además, otros espacios veteranos, como 'Los Toros' de Cadena SER también se han ido cancelando con el paso de los años.