Este jueves 15 de junio se acaba por fin el roaming dentro de la Unión Europea, lo que implicará que todos podamos usar el teléfono móvil en el extranjero con las mismas tarifas que en España. Se trata del final de un largo proceso de negociaciones y del duro trabajo de la Unión Europea, que se vio obligada a pelear contra los lobbies de la telefonía que se habían mostrado muy contrarios a esta medida.
Una década de negociaciones en total, que tendrá como resultado que se rebaje un 90% el coste de las llamadas para todos los usuarios comunitarios.
1 ¿Qué supone?
La aplicación de esta medida implicará que se pueda llamar desde los 28 estados miembro de la Unión Europea con el mismo coste que en España. Así, la lista de países se compone de Austria, Bélgica, Bulgaria, Croacia, Chipre, República Checa, Dinamarca, Estonia, Finlandia, Francia, Alemania, Grecia, Hungría, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Malta, Países Bajos, Polonia, Portugal, Rumanía, Eslovenia, Eslovaquia, España, Suecia y Reino Unido.
Por otro lado, el programa también tiene previsto incluir a otros países extracomunitarios y que se encuentran dentro del área de influencia de la UE, lo que incluiría a países como Islandia, Liechtenstein y Noruega. Reino Unido, después de consumar el Brexit, también se incluirá en este aspecto.
Además, algunas compañías han decidido que esta medida puede suponer una diferenciación de la competencia, y han apostado por incluir el fin del roaming en otros países más lejanos como los Estados Unidos.
2 ¿Puedo llamar a Berlín desde España con el mismo coste?
No. El fin del roaming significa que podremos usar nuestro teléfono en el extranjero con los mismos cargos que en nuestro país, pero las llamadas internacionales desde España seguirán costando igual.
De hecho, si llamamos desde el país en el que nos encontramos a un teléfono de dicho país, nos cargarán la conversación como si de una llamada internacional se tratase. Por eso, si te encuentras en esa situación, será mejor que vuelvas al siglo XX y busques una buena cabina de teléfono.
3 ¿Puedo usar mi tarifa exactamente igual que en España?
No exactamente. Las compañías han tenido el permiso para establecer límites más restringidos a los usuarios que cuenten con una tarifa de datos más extensa que la media.
En el caso de que tomen esa norma, la compañía deberá avisar a los usuarios previamente y no podrá cobrar ningún recargo sin el conocimiento expreso de los usuarios.
4 ¿Puedo contratar una compañía más barata de otro país?
No. La UE quiere evitar estas posibles situaciones de manera expresa, por todo ello, establecerá unos límites de tiempo y permitirá que las compañías sancionen a los usuarios que están cometiendo abusos.
Lo que se quiere es que se realice lo que han calificado como un "consumo responsable". Así, la compañía podrá enviar un mensaje de alerta en el plazo de dos semanas para que el usuario acredite las circunstancias de su viaje. Siempre debe de avisar con antelación.
Las diferencias de renta entre países podrían provocar que un usuario de un país más rico contratase un operador de otro país más humilde y permaneciese en su nación de origen con una tarifa más barata. Algunos países como Bulgaria tienen sueldos de 200 euros mensuales, mientras que en Francia el suelo mínimo es de 1.300 euros.
5 ¿Habrá algún tipo de recargo?
Sí. En el caso de que los usuarios superen las tarifas de voz y datos contratadas, la compañía contará con la posibilidad de cobrar un suplemento por continuar usando el teléfono.
Sin embargo, el recargo tendrá unos límites muy claros: en concreto, será de 3,2 céntimos por minuto en llamadas de voz (+IVA), un céntimo por SMS y 7,7 euros por cada gigabyte de datos consumido.
6 ¿Me subirán la tarifa en mi país?
Aún no se ha concretado, pero las compañías se han quejado de que tienen que aumentar sus inversiones porque las redes tendrán a partir de ahora una mayor presión de usuarios conectados. Las empresas han tenido que aumentar los servicios con los que ya cuentan, y todo ello puede repercutir en el usuario final.
Desde Bruselas no quieren limitar a las compañías, aunque han afirmado que las vigilarán para que los aumentos de costes no sean excesivos. Por el momento, ninguna empresa se ha manifestado en este asunto, aunque moverán ficha dentro de poco.