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La FIFA abraza la LGTBIfobia: veta el brazalete arcoíris en el Mundial de Qatar con amenazas de sanciones deportivas

Las selecciones que lo iban a lucir en el Mundial de Qatar renuncian a ello ante el anuncio de la FIFA.

La FIFA abraza la LGTBIfobia: veta el brazalete arcoíris en el Mundial de Qatar con amenazas de sanciones deportivas

Se consuma un nuevo bochorno en el Mundial de Qatar en pleno arranque de la competición deportiva. La Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) ha amenazado con sanciones deportivas a todos aquellos jugadores que luzcan brazalete arcoíris durante los partidos.

Siete selecciones europeas, entre las que no se encontraba España, habían solicitado formalmente a la FIFA usar el brazalete del movimiento 'One Love' para denunciar la violación de derechos humanos que se sufre en el país de Medio Oriente, especialmente las que atentan contra el colectivo LGTBI.

A través de un comunicado conjunto, las federaciones de Países Bajos, Inglaterra, Gales, Bélgica, Suiza, Alemania y Dinamarca han lamentado que sus capitanes finalmente no lucirán el brazalete pues, si bien estaban dispuestos a asumir multas económicas, la sanción anunciada por la FIFA implicaría que todos saldrían al campo con una tarjeta amarilla.

El portador del brazalete de capitán en cuestión sería amonestado al inicio del partido, además de una sanción económica tanto al jugador como a la Federación en cuestión. Ante tal situación, las selecciones han renunciado a su intención inicial. Una segunda tarjeta amarilla durante la competición, implicaría la sanción de un partido.

"Como federaciones nacionales, no podemos poner a nuestros jugadores en una posición en la que puedan enfrentarse a sanciones deportivas, incluidas las reservas", explica el comunicado en el que aseguran sentirse "frustrados".

"Escribimos a la FIFA en septiembre informándoles de nuestro deseo de llevar el brazalete 'One Love' para apoyar activamente la inclusión en el fútbol, y no tuvimos respuesta. Nuestros jugadores y entrenadores están decepcionados", añaden.

La FIFA, en el centro de la polémica

Esta polémica vuelve a poner a la FIFA en el foco de la defensa de los derechos humanos después del alegato por el régimen qatarí que hizo su presidente, Gianni Infantino, con un bochornoso discurso en el que aseguró sentirse "qatari, árabe, africano, gay, discapacitado y trabajador migrante".

Cabe recordar que la FIFA, para contrarrestar la campaña 'One Love', ha lanzado una serie de brazaletes reivindicativos con los que no molestar al país que acoge el Mundial con textos como "No discrimination" o ·Football unites the world".

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