El Gobierno murciano (PP y Ciudadanos) ha aprobado sus presupuestos en la Asamblea regional, gracias al apoyo externo de VOX. Las cuentas, en las que se incluye un aumento de 3.000 euros en el sueldo del presidente Fernando López Miras; también incluyen un recorte cargado de polémica: 57,5 millones de euros menos para material sanitario y farmacia hospitalaria en plena pandemia.
La oposición ha criticado duramente la medida, por el contexto y por la subida de sueldo que repentinamente se aprueba para sí mismo el presidente. De hecho, lejos de recortar en sueldos, López Miras equipara su salario a los de la vicepresidenta y consejera de Política Social, Isabel Franco; además de la portavoz y consejera de Hacienda, Ana Martínez Vidal. Ambas cobran 75.533 euros frente a los 72.706 que hasta ahora cobraba el presidente.
Unidas Podemos ha cargado duramente contra el recorte en Sanidad: "Resulta imposible asumir unas cuentas que consagran recortes en el Sistema Murciano de Salud y en la sanidad en general de más de 57 millones de euros".
La formación morada destaca que se están ejecutando en un momento en el que "todos los ciudadanos y ciudadanas estamos viendo el coste que tiene para la seguridad y para la salud no haber atendido la sanidad, especialmente la Atención Primaria".
Como denuncia la oposición, los recortes se enmarcan en el material sanitario (30 millones de euros) y farmacia hospitalaria (27,5 millones de euros), algo que se especifica en los documentos a los que ha tenido acceso El Diario.
El truco para esconder el recorte
En los datos oficiales, el Gobierno solo promociona el dato en bruto, es decir, que el presupuesto de Sanidad aumenta en 2 millones de euros. El problema es que ese dinero es inferior al que realmente se gastó en el año 2019 (cuando no había todavía pandemia).
Además, teniendo en cuenta la subida de sueldo correspondiente al aumento del PIB, que se paga a todos los profesionales sanitarios, el montante es insuficiente para mantener el sistema sanitario, en varias partidas como farmacia y material sanitario.
El Gobierno murciano, que aprobó las cuentas el pasado martes 21 de abril, asegura ahora que las cuentas programadas están desfasadas en algunos puntos y se comprometen a modificarlas para que estén adaptadas a las circunstancias actuales.
La situación es especialmente llamativa, cuando el Ejecutivo regional ha convocado un pleno para aprobarlas, en vez de corregir todas las partidas que no se ajustan al escenario actual y posteriormente buscar el apoyo de la Cámara.