Los datos muestran que las personas LGTBI sufren discriminación por una cuestión de ingresos por trabajo, cuya media se encuentra por norma general por debajo del resto de la población.
El informe 'Estado socioeconómico LGTBI+' elaborado por la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans, Bisexuales, Intersexuales y más (FELGTBI+), que cuenta con 800 entrevistas a población del colectivo mayor de 18 años y elaborado por la empresa 40dB, muestra la realidad de las personas que forman parte del colectivo, con una renta media neta por hogar que cae hasta los 26.077 euros frente a los 32.216 euros de la media general en España.
La desigualdad económica a la que se enfrentan las personas LGTBI en España se explica por diferentes motivos: "Puede explicarse a factores como el abandono temprano del hogar por expulsión, que afecta directamente en la formación y la trayectoria laboral", explica el secretario de Organización de la FELGTBI, Ignacio Paredero.
"Estos datos, junto con otros adicionales, como la tasa AROPE (riesgo y exclusión social) y la incidencia del sinhogarismo, señalan que, lejos del estereotipo de que las personas LGTBI+ son económicamente pudientes, hacen que las familias LGTBI+ sean, de media, más pobres", indica Paredero sobre este estudio. La realidad es que el 35% de las 33.000 personas sin hogar en España son LGTBI, según la encuesta de la Agencia de Derechos Fundamentales de la Unión Europea (FRA).
Esta situación se une a otra característica, que solo el 72,5% de la población LGTBI+ son personas asalariadas por cuenta ajena, un dato que rebaja en trece puntos a la población general. Esto lleva a gran parte del colectivo al autoempleo, en concreto, 7,4 puntos más que la población en general.
Un 25% de la población LGTBI todavía no ha podido salir del armario
Los contextos de discriminación a los que se enfrentan las personas LGTBI revelan, además, que el 25% de la población perteneciente a este colectivo todavía no ha podido salir del armario. Sin embargo, las nuevas generaciones sí aprecian una mayor capacidad de visibilizarse y libertad.
La responsable de investigación, formación y calidad de la Federación Estatal LGTBI+, María Rodríguez, señala que "la edad de salida del armario por tramos de edad muestra la evolución histórica de la conquista de derechos y la evolución de la sociedad. Y es que se observa que, en los tramos de edad más jóvenes, las personas LGTBI+ salen del armario mucho antes".
De este modo, entre 18 a 24 años y los que tienen entre 25 y 34 años, entre un 13,7% y un 11% salió del armario con 14 años y menos, cifras que se reducen a menos de la mitad a partir de los 35 años. En el mismo sentido, el porcentaje de quienes salieron del armario con 15 y 17 años pasa del 45% entre los de 18 y 24, al 20% a partir de los 35 años.
