Tras dos años de pandemia, el coronavirus sigue estudiándose y proporcionando todo tipo de resultados en cuanto a sus síntomas, factores de riesgo o forma en la que se desarrolla la enfermedad. Ahora, un nuevo estudio ha querido evaluar qué factores son los que pueden predecir que los niños vayan a pasar la enfermedad de una forma más grave.
El estudio ha sido llevado a cabo por la Universidad de Calgary (Canadá), el Hospital Infantil Ann & Robert H. Lurie de Chicago y el Centro Médico de la Universidad de California-Davis (Estados Unidos) y ha sido publicado en la revista 'JAMA'.
En él se ha realizado un seguimiento a más de 3.200 niños de 41 servicios de urgencias pertenecientes a 10 países distintos, entre ellos España, Estados Unidos, Canadá, Italia o Australia.
Estos niños acudieron a los servicios de urgencias de sus países tras dar positivo en coronavirus. De ellos, aproximadamente el 3% (107 niños) experimentaron síntomas graves en las dos semanas posteriores. Además, un 23% (735 niños) tuvieron que ser hospitalizados para recibir tratamiento.
Los resultados
Los resultados graves en estos niños incluyeron complicaciones cardíacas o cardiovasculares, así como problemas neurológicos, respiratorios o infecciosos. En total murieron cuatro niños.
Entre los factores en niños que pueden desembocar en una enfermedad grave, el estudio concluyó que se encuentra la edad avanzada, tener una enfermedad crónica preexistente y la duración de los síntomas: "El estudio pretendía cuantificar la frecuencia y los factores de riesgo de los resultados graves en los niños con COVID-19. Descubrimos que la edad avanzada, tener una enfermedad crónica preexistente y la duración de los síntomas eran factores de riesgo importantes para los resultados graves", explica Stephen Freedman, codirector del estudio.
Por otro lado, el estudio también observó que los niños que son considerados sanos cuando acudieron al hospital, rara vez tuvieron efectos graves en la enfermedad. Además, el análisis también concluyó que no se puede confirmar el asma como un factor de riesgo de resultados graves. De la misma forma también se observó que los bebés muy pequeños no tienen un mayor riesgo de sufrir estos resultados.
"Afortunadamente, el riesgo de desarrollar una enfermedad grave en los niños con COVID-19 dados de alta del servicio de urgencias es muy bajo. Nuestros hallazgos pueden tranquilizar a los padres y a los médicos en el caso de los niños que están lo suficientemente bien como para ser tratados en la comunidad, al mismo tiempo que proporcionan información importante sobre qué niños pueden tener un riesgo particular de sufrir resultados graves", concluye Todd Florin, otro de los responsables del estudio.