Facebook sufre otro duro contratiempo en materia de seguridad. Un error en el software de la compañía estadounidense ha propiciado que los mensajes privados de 14 millones de usuarios que tuvieran lugar entre los días 18 y 27 de mayo sean de dominio público y estén al alcance de todos sin consentimiento previo de los damnificados.
La empresa detectó la anomalía el 22 de mayo, y tardó cinco días en solucionar el problema. Los mensajes afectados pueden ser tanto los chat privados como aquellos publicados en grupos reducidos y cerrados.
La firma, si bien no ha explicado el origen o la causa del fallo informático, ha pedido disculpas a través del responsable de privacidad de la compañía, Erin Egan. "Hemos arreglado el tema y a partir de hoy estamos dejándolo saber a todos los afectados y pidiéndoles que revisen sus publicaciones que hicieron durante ese período", añadió en el comunicado.
En el ojo del huracán
No están siendo unos meses fáciles para Mark Zuckerberg. Su compañía, que alberga a más de 2.000 millones de usuarios, se encuentra inmerso en la peor crisis de confianza de su historia debido a sus irregularidades en materia de seguridad.
Pudo hacer frente a varios casos polémicos que saltaron a la prensa, pero no al escándalo de Cambridge Analytica destapado por The Guardian y The New York Times. La noticia de que la consultora británica había utilizado datos personales de 50 millones de usuarios de Facebook para predecir e influir en sus votos terminó con Zuckerberg testificando en el Senado de EEUU y en el Parlamento Europeo y con su creación en niveles mínimos de popularidad.
La empresa ha modificado su política de seguridad, pero su gestión de los datos privados sigue dando de qué hablar. De hecho, hace unas horas salía a la luz que la firma había dado permiso a cuatro importantes fabricantes de móviles chinos (Huawei, Lenovo, Oppo y TCL) a acceder a la información de los amigos de los usuarios. Facebook aseguró que todo estaba "controlado", mientras que parece empeñado en no salir de la espiral de destrucción en la que se haya inmerso.