Diez años después de legalizar el matrimonio entre personas del mismo género en España, la sensibilización sobre la discriminación a homosexuales ha aumentado, aunque todavía hay una gran parte de la población que no entiende, o peor, condena a los transexuales. Por algo los días del Orgullo más recientes han puesto especial énfasis en este tema. En un país desarrollado en el que los derechos de hombres y mujeres son -o deberían ser- iguales, los roles sociales de unos y otros van -o deberían ir- desapareciendo y la línea que define el género se está -o debería estar- difuminando, ¿qué sentido tiene seguir insistiendo en diferenciar por género, o hacerlo únicamente entre dos opciones?
El debate es muy amplio y extenso y se podría prestar atención a otros tipos de sociedades del mundo en las que los roles de género no tienen nada que ver con los nuestros y entran en relación con la edad o la fertilidad, por ejemplo. En cualquier caso, lo importante es que Facebook, esa red social que es más bien una segunda vida, decidió hace tiempo dejar que cada persona se defina con la identidad de género que prefiera.
Al editar la información básica de vuestro perfil, en el apartado de "Sexo", aparecen ahora tres alternativas: hombre, mujer y personalizar. Al pulsar en esta opción se puede escribir la identidad con la que cada persona se sienta más identificada. No solo eso, sino que Facebook contempla la existencia de opciones como andrógino/a o andróginx, así como transgénero o intersex, ya que, al comenzar a escribir, sugiere estas alternativas registradas en su base de datos. Esto puede ser útil para que las personas con una identidad sexual diferente a hombre o mujer puedan también buscarse y establecer contacto. No obstante, si no se encuentra la opción deseada se puede escribir una personalizada.
Del mismo modo, también se puede elegir la opción preferida en cuanto al pronombre (masculino, femenino o neutro) con el que se referirán a ti, por ejemplo, a la hora de felicitarte el cumpleaños. Esto quizás tiene más sentido en inglés, donde se suele utilizar más los pronombres ("wish him a happy birthday" frente a "deséale a él un feliz cumpleaños", que suena un poco forzado). Otra opción es ocultar esta información y no compartirla con nadie, algo a lo que todos deberíamos tener derecho.
Una buena idea con un pequeño tirón de orejas
Eso sí, Facebook se lleva un pequeño tirón de orejas por mezclar churras con merinas. Y es que en la información sobre el sexo se incluyen opciones de orientación sexual, como gay, lesbiana, pansexual o poliamoroso/a/x. Este es uno de los principales problemas al que se enfrenta el colectivo LGTB, ya que a menudo se dan por sentadas ciertas asumciones que no tienen por qué ser así. Una persona puede identificarse como hombre y ser pansexual, o ser transexual y ser poliamoroso, o algo tan simple como que te gusten los hombres sin ser mujer (la típica lacra del hombre afeminado): no tiene nada que ver el género con la orientación sexual.
A la vez que ocurre esto, en el campo de "quién te interesa" solo se puede elegir entre hombres, mujeres o ambos. Por otro lado, al escribir en el campo de "Sexo" aparecen opciones como puto, torta o trava, calificativos despectivos para gay, lesbiana y travesti, respectivamente, especialmente en latinoamérica. La idea de Facebook es muy buena y ayuda en la sensibilización, pero aún tienen que darle un repaso para evitar estos errores. En cualquier caso, es un paso adelante. Minipunto para Zuckerberg.
