Medio planeta se echó las manos a la cabeza cuando se enteró que Mark Zuckerberg, el creador de Facebook, utilizaba y vendía nuestros datos. Sin embargo, la gente no está dudando en ningún momento en utilizar FaceApp, la aplicación que está causando verdadero furor, cuando realmente se está vendiendo prácticamente nuestra "alma" -datos-, al diablo.
FaceApp ha llenado redes sociales de personas anónimas y famosas de selfies caracterizados como niños, ancianos o cambiándose de sexo. La realidad, como viene pasando normalmente con este tipo de apps, es que detrás de toda esa diversión esconde una política de privacidad tan ambigua que pone en riesgo nuestra privacidad. Nadie da duros por pesetas.
Política de privacidad ambigua
Los rusos viendo como le damos nuestros datos a través de la #FaceApppic.twitter.com/3g46fWLkBv
— The Satanist ???? (@lefuelar) 17 de julio de 2019
El uso de esta aplicación abre de nuevo el debate o la reflexión sobre el uso de esta app -y otras-, y el peligro que corre nuestra privacidad, es decir, hasta qué punto se expone la persona. ¿Quién, cómo o de qué forma utilizan los datos obtenidos? En Hipertextual lo tienen claro: la gente no es consciente de a quién se los entregan. En este caso, parece que a los rusos ya que FaceApp es de origen ruso.
La política de privacidad de FaceApp, no actualizada desde principios de 2017, es ambigua. Aunque realmente "poco" importa porque nadie termina leyéndola. Sin embargo, la aplicación no solo vendría a recolectar todo el material -fotos y videos- generados, sino que, también recopila información relativo al "comportamiento del medio de herramientas de análisis de terceros, cookies e identificadores de tu dispositivo para proveer contenido personalizado y publicidad".
Licencia perpetua
A pesar de que su política de privacidad dice que no vendrá tu información a terceros, si explica que tendrán acceso a ella aquellas empresas que formen parte del grupo de la app. Hipertextual explica que a pesar de que FaceApp dice que el almacenamiento de esa información está en Estados Unidos, puede cambiar en cualquier momento a otro país con otras leyes distintas, es decir, donde hay más permisividad con el uso y tratamiento de esos datos.
No solo eso, los usuarios de FaceApp otorgan a los creadores de la app una "licencia perpetua, irrevocable, no exclusiva, sin royalties, totalmente pagada y con licencia transferible" que podrá "usar, reproducir, modificar, adaptar, etc.", según marca la política de privacidad. Incluso, colgar tu "rostro online junto a su nombre y otros datos de identificación queda vulnerable a ser capturado digitalmente para futuros usos de reconocimiento facial", explica un abogado a Hipertextual.