Año 2021. Pleno siglo XXI. La LGTBIfobia sigue siendo una de las peores lacras de la sociedad. Y no estamos hablando del Tercer Mundo, sino de Estados Unidos. Por sorprendente que parezca, una escuela cristiana del estado de Oklahoma ha optado por expulsar a una niña de ocho años por decirle a una compañera que estaba enamorada de ella.
El suceso tuvo lugar en en el colegio Rejoice Christian School de Owasso. A la hora del recreo, la pequeña Chloe Shelton se atrevió a declararse sus sentimientos a una compañera de clase. Esto bastó para que fuera llevada la oficina del director. Según el relato de la pequeña, "el subdirector la sentó y dijo que la Biblia dice que solo puedes casarte con un hombre y tener hijos con un hombre", ha narrado la madre a la CNN.
Delaine, madre de la niña, incluso ha asegurado que que el subdirector le preguntó a Chloe cómo se sentía acerca de las chicas a las que les gustan otras chicas y la pequeña respondió: "creo que está bien que a las chicas les gusten las chicas". A la mujer también le hizo la misma pregunta y esta también respondió que no veía ningún problema. Fue entonces cuando los responsables del centro le pidieron que se llevara a su hija y que no volviera al día siguiente.
Al día siguiente, según la versión de la madre, el directo,r Joel Pepin, la llamó por teléfono: el colegio terminaba la "asociación" con la familia y expulsaban también a su otro hijo, de cinco años, porque las creencias de ambos no estaban alineadas y no había discusión posible.
"Sacaron a mis hijos de la única escuela que han conocido, lejos de sus maestros y amigos que habían tenido durante los últimos cuatro años y todo por algo que mi hija probablemente no sabe o no comprende del todo", ha lamentado la madre de los niños expulsados. "Lo peor de esto es que les estamos diciendo a los niños que está mal amar, que es malo sentir", ha criticado Delanine. "Y lo peor es que viene de una escuela cristiana, donde dicen que Dios no te ama por lo que eres y eso no es cierto", ha añadido.
Tras la expulsión, la madre de Chloe ha contado que la menor quedó "desbastada" y que "no paraba de llorar". Sin embargo, este suceso ha despertado una oleada de apoyo a la niña, que ha recibido cientos de mensajes de personas de todo Estados Unidos en los que le dicen lo orgullosos que están de ella. "Ahora se siente amada y apoyada gracias a todas las personas increíbles que se han acercado a nosotros", ha agradecido la mujer, quien ha dicho que la niña "está emocionada por comenzar las clases en una nueva escuela".
Rígido código de la escuela
"Debido a la privacidad y otros factores, es política de la escuela abstenerse de comentarios públicos sobre cualquier estudiante o familia en particular", ha comunicado el Rejoice Christian School a través de un comunicado.
Este centro religioso tiene unas normas de conducta muy rígidas en las que "cualquier forma de inmoralidad sexual, como el hecho de ser homosexual o bisexual, hace que los estudiantes pierdan el privilegio de asistir" al colegio. Algunas de ellas son no mostrar afecto en público, como besarse, abrazarse o cogerse de la mano. Además de estar embarazada, dado que otras estudiantes "podrían sentirse atraídos por un mal ejemplo y hacer lo mismo".
Por si esto fuera poco, la escuela reunió a todos los alumnos de segundo grado, de entre 7 y 8 años, y se les dio una conferencia en la que la tesis era que las relaciones solo deberían ser entre hombres y mujeres.