Cuántas veces habremos escuchado que hay que tener cuidado con lo que se publica en las redes sociales. Con las nuevas tecnologías de difusión inmediata, cualquier cosa puede hacerse viral en cuestión de segundos, pero que sea popular no lleva implícito el hecho de que sea bueno. Eso justo es lo que ha ocurrido con una viñeta en la que se muestra a una mujer que se transforma al leer un libro. El evidente contenido machista que desprende la fotografía ha provocado que tanto el dibujo como la autora recibieran un aluvión de críticas.
Ante la gran repercusión que ha tenido, la artista creadora de la ilustración, apodada Sortmid en la comunidad DevianArt, ha utilizado el foro de la página para dar una explicación sobre el origen de la caricatura. Según esta, el dibujo iba dirigido a un público minoritario con preferencias por el fetichismo "bimbo transformation". Este destaca por la transformación de los personajes de las viñetas, normalmente de chicas 'normales' a chicas hipersexualizadas. No obstante, también son populares las metamorfosis de hombres a mujeres, cuyos rasgos siguen la línea del ejemplo anterior.
Igualmente, la artista ha querido aclarar que la viñeta era una pieza por encargo, en el que le solicitaron que ilustrara una transformación a la inversa, de una chica hipersexualizada a una chica 'normal'. Sortmid declara que aceptó el pedido sin pensar en las consecuencias, y que no se planteaba que la viñeta fuera vista descontextualizada, es decir, fuera de la comunidad bimbo. Sin embargo, la diseñadora no ha querido realizar un alegato de esta y ha utilizado su mensaje para pedir disculpas a todos los que se hayan podido ver ofendidos:
Puede que fuese iluso por mi parte asumir que era solo 'otra transformación'. La gente no lo ve como 'porno', lo ven como una declaración. Su crítica es válida. Quiero disculparme por utilizar esos estereotipos. Procuro crear un contenido erótico que sea al mismo tiempo sexy y feminista. Queda claro que, en esta ocasión, he fallado de forma espectacular y por eso pido disculpas
Las redes sociales han aceptado sus disculpas, ante la demostración de que la artista es consciente de que ha cometido un error. Es cierto que la viñeta iba destinada a un contexto determinado, y eso es entendible, pero utilizar la cultura como la herramienta de transformación no ha sido el arma más eficaz, ya que este tipo de viñetas lo único que consiguen es perpetuar la creencia mal fundada de que una mujer culta no puede ser atractiva.