11 bebés muertos. Ese ha sido el resultado de un ensayo con sildenafil, el medicamento vendido bajo el nombre de Viagra, realizado en Holanda. Las circunstancias que han derivado del experimento han provocado que se suspenda de manera inmediata.
En el momento en el que se pararon las investigaciones, un total de 183 mujeres embarazadas aún se encontraban consumiendo esta sustancia, tal y como ha señalado el Centro Médico Académico de la Universidad de Ámsterdam (AMC)..
Las investigaciones comenzaron con el fin de averiguar los presuntos efectos beneficiosos de esta sustancia en fetos severamente subdesarrollados. Para ello, señalaron el aumento del flujo sanguíneo hacia la placenta: "Estudios previos han demostrado que el sinenafil tendría un efecto positivo en el crecimiento de los bebés. Los primeros resultados del estudio actual mostraron que puede haber efectos adversos para el bebé después del nacimiento", relatan desde la AMC.
Por el momento, hay 17 casos registrados en los que los bebés han sufrido secuelas. Son 17 pequeños que nacieron con problemas pulmonares, de los que han muerto once. Sin embargo, la lista podría aumentar, ya que alrededor de 15 mujeres que consumieron la sustancia aún no han dado a luz.
Problemas pulmonares
Todos los bebés afectados han presentado cuadros similares. En concreto, once muertes por "una condición pulmonar posiblemente relacionada" con una alta presión sanguínea en los pulmones, lo que podría haber derivado en un fuerte nivel de oxígeno.
El medicamento fue desarrollado originalmente por Pfizer, pero actualmente no cuenta con patente. La empresa no ha querido hacer comentarios por el momento, según señala Efe. Su medicamento se encuentra ahora bajo genérico en el caso de que se adquiera bajo el paraguas de otras farmacéuticas.
