Rowan Baxter, conocido exjugador de rugby de 42 años que jugó en los New Zealand Warriors de la National Rugby League (NRL), ha quemado vivos a sus tres hijos y a su mujer en el coche, según ha informado la BBC. Minutos más tarde, él se suicidó apuñalándose con un cuchillo. Tanto él como sus hijos murieron al instante, en cambio la mujer fue ingresada en el hospital, aunque murió a las horas como consecuencia de las graves heridas que tenía por el fuego, según ha informado The Guardian.
La pareja se había separado a finales del año anterior y estaba con los trámites para llegar a un acuerdo de la custodia. Sus tres hijos tenían menos de diez años, ella tenía 31 y él 42. Todos se encontraban en el coche cuando prendió en el área de Camp Hill, situado en Australia, sobre las 8:30 (hora local).
Baxter iba sentado durante el camino en el asiento del copiloto, una vez parados sacó un bidón de gasolina que roció en sus hijos y su exmujer. Minutos después, el coche se encontraba en llamas. Un vecino de la zona salió cuando escuchó la explosión, corrió a ver lo que sucedía y se encargó de llamar a la policía.
Los detectives siguen investigando todo lo ocurrido
"No hemos podido determinar aún el modo en el que han ocurrido los hechos, por lo que es inapropiado definirlo como asesinato o suicidio", dijo el inspector- detective Mark Thompson.
Según testigos, la mujer Hannah Baxter tuvo el tiempo suficiente para saltar del coche y gritar que le había echado gasolina encima, pero no sirvió de nada, puesto que sus hijos murieron a causa de la inhalación de humo y las quemaduras.
Ahora, se espera la celebración de un juicio para intentar esclarecer los hechos con algunos testigos que se encontraban en el lugar en el momento del asesinato. El inspector ha adelantado que llamarán a testificar a todos aquellos que puedan aportar datos sobre lo sucedido.
Por otro lado, un hombre que intentó salvar a la familia sufrió quemaduras en la parte superior del cuerpo a causa de las llamas y tuvo que ser transladado al hospital Royal Brisbane, según el portavoz de la ambulancia. El medio digital Cournier Mail informó de que la calle fue bloqueada por cintas en ambos extremos de la calle y el automóvil fue envuelto con un plástico naranja.