Tras semanas de elucubraciones sobre el número de participantes para Eurovisión 2023, por fin tenemos cifra. En una Europa castigada por los efectos de la invasión rusa en Ucrania y la más que evidente crisis energética, más de un país se ha planteado hasta el último momento estar o no en el festival británico del mayo próximo.
37 países formarán parte de una edición de Eurovisión que no cuenta con ningún debut ni vuelta, así como suma las bajas de Bulgaria, Macedonia del Norte y Montenegro , por diversos motivos.
37 countries will join the party for #Eurovision 2023 in Liverpool! ????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????
— Eurovision Song Contest (@Eurovision) October 20, 2022
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Esta cifra de países es calcada a las que tuvimos en Copenhague en 2014 y en Atenas en 2006, y garantiza unas semifinales de 15 participantes y 16 respectivamente. ¿Qué motivos ha habido para las marchas? Te lo contamos.
Bulgaria: inestabilidad política y desafección a Eurovisión
Bulgaria ha pegado un giro de 180 grados respecto a Eurovisión en apenas dos años. Si hace no mucho tenía la pinta de ser un país que estaba trabajando mucho y bien para ganar el festival, lo cierto es que un cambio de delegación lo hace cambiar todo. La marcha de Vasil Ivanov y su equipo, hizo que en solo un año pasásemos de proyectos tan ambiciosos como los de Victoria, Kristian Kostov o Poli Genova, a pasar de puntillas por el festival el año pasado con Intelligent Music Project, un grupo aupado por su empresario fundador Milen Vrabevski.
Si a esto le sumamos que en Bulgaria han ido a las elecciones tres veces en prácticamente año y medio y que la inestabilidad política es total, la historia se cuenta sola. Eurovisión para muchos países es un dispendio y, en un momento complicado, de lo primero que deshacerse.
La BNT no ha emitido un solo comunicado y apenas se ha dignado a desear suerte al resto de participantes luego de desactivar su cuenta de Twitter más de una semana. Desde luego ya no es la marcha búlgara este año, es la sensación de que pinta para largo.
Montenegro: impedimento económico insalvable
Montenegro es de esos países que en cuanto le supone un problema económico marchar del festival, lo acaba haciendo. Ya lo hizo entre 2020 y 2021, cuando ante la necesidad de la televisión pública de adquirir unos coches oficiales, prefirieron comprarlos con ese presupuesto a ir a Eurovisión.
Ahora, la situación es más complicada, ya que es la crisis energética y lo costoso de ir a Eurovisión les ha apartado de un festival que se tomaron con mucha ilusión el año pasado y que no les salió nada bien con Vladana. Esas críticas airadas por como salió todo en Turín podrían haber influido también en la decisión final.
Macedonia del Norte: entre el dinero y la polémica nacionalista
Macedonia del Norte también ha alegado problemas económicos y sufrir sobremanera la crisis energética para marcharse de Eurovisión. Sin embargo, la situación estos dos últimos años con el festival tampoco ha sido fácil.
Y es que en un país donde el ultranacionalismo está muy patente, y su enemistad con Bulgaria también, tener dos años seguidos lo que consideraban desplantes de los representantes hacia la nación, fue un problema muy grave.
En 2021, en el videoclip de Vasil se intuía una bandera de Bulgaria, un hecho que llevó a una polémica enorme, agravada más al ver al artista siendo compositor de la candidatura búlgara a Eurovisión Junior meses después. En el caso de Andrea el año pasado, sería algo más baladí como arrojar al suelo una bandera en el flag parade para hacerse una foto lo que desató la locura.
Es considerado hasta delito en el país y la televisión avisó de que se planteaban hasta dejar el festival por ello. Al final ha ocurrido, aunque desde la MRT avisan que emitirán semifinales y final y que esperan volver para 2024.
Los debuts, para otro año
Además de las marchas para Liverpool, Eurovisión 2023 también será un año sin debuts de relevancia. En la tesitura de que países como Chequia o Armenia dudaban hasta el último momento de su participación en el festival, los rumores abrieron la posibilidad a que Kazajistán hiciera su debut en Reino Unido.
Desde la Agencia Khabar, responsable de Kazajistán en la UER, se indicaba que estaban trabajando en el debut, un estreno que al final no se ha alcanzado. Con todo esto, los 37 parecen una cifra baja, pero comprensible debido a la crisis económica que se avecina en el viejo continente. Y nadie dice que un festival de pocos países tenga que ser malo, el nivel lo dictarán los artistas y canciones.