Wu Huayan era estudiante y trabajaba en dos sitios diferentes para poder ayudar a su hermano, quien tenía una enfermedad mental. Todo lo que ahorraba lo destinaba a la salud de su hermano, llegando a alimentarse con 26 céntimos al día y únicamente de arroz durante sus últimos 5 años.
La chica y su hermano eran huérfanos de padre y madre, ambos murieron cuando ella era adolescente. Desde entonces han vivido con una ayuda que le daba el estado de 39,09 euros al mes en concepto de pensión por horfandad. Al quedarse huérfanos los niños fueron adoptados por su abuela y más tarde por su tía. La familia también era pobre, por lo que solo podían ayudarles con 30 euros al mes.
La residente de Guizhou trabajaba en dos empresas diferentes al mismo tiempo que estudiaba en la universidad de su ciudad. Con su trabajo solo ganaba 28 euros al mes. Al final de su vida no podía caminar debido a su poco peso y la mala alimentación que tenía.
Cuando fue ingresada en el hospital sufría una desnutrición severa. Pesaba 21 kilos y medía 1,35 cm. Como consecuencia de su mala alimentación perdió el cabello, las cejas, tenía zumbidos en los oídos y problemas cardiacos. Finalmente murió por insuficiencia cardiaca, ya que necesitaba una operación urgente que no recibió.
"No quiero morir por ser pobre"
Wu Huayan hizo un llamamiento por redes sociales diciendo que no quería morir por ser pobre. La operación que necesitaba tenía un coste superior a 26.000 euros, precio que no podía asumir. La población se volcó con la causa y lograron reunir 60.000 euros, aparte el gobierno ayudó a la joven con un donativo. Sin embargo, las ayudas no llegaron a tiempo y la joven estudiante murió el pasado lunes.
A raíz de este hecho, gran parte de la ciudadanía ha criticado la gestión por parte del Estado, ya que permitió que muriera en malas condiciones y, sobre todo, por el hecho de no tener recursos económicos para afrontar el coste de la cirugía.
Según indica el periódico chino People's Daily, Guizhou, lugar donde vivía Wu con su hermano, es el barrio más pobre del país. Como consecuencia de esta noticia, China dijo públicamente que se comprometía a implementar un plan para la lucha contra la pobreza.
Guizhou es una de las regiones más pobres del país
A pesar de que China es uno de los países que ha disfrutado de mayor crecimiento económico en los últimos años, las zonas rurales del país han quedado abandonadas por los gobiernos. Estas regiones no se han beneficiado del buen rumbo de la economía china. Sobre todo, las regiones costeras han sido una de las más afectadas.
La ciudad natal de Wu Huayan está inmersa en una gran crisis, los impuestos son tan altos que los ciudadanos no pueden hacer frente al gasto. Uno de los impuestos más altos, según la BBC, es en la agricultura, a pesar de que el gobierno ha prometido que los bajará.
