Inditex va a por Primark, que vive una fuerte crisis como consecuencia de la pandemia del coronavirus. Primero vamos a analizar cuál es la situación actual de la compañia irlandesa y el plan con el que la firma gallega quiere despuntar.
Porque el panorama para Primark no es halagüeño. En una empresa que no cuenta con tienda online y que vive de la venta por volumen; los aforos, el orden estricto, los confinamientos y la reducción del tráfico hacia polos comerciales pueden suponer la puntilla.
La situación es tan crítica, la consultora Morgan Stanley ha dibujado tres escenarios sobre el futuro de Primark. Y lo peor de todo: no controla ninguno. Todo lo relacionado con esta empresa depende exclusivamente de la llegada de la vacuna y de la existencia o no de una segunda ola.
El peor de esos escenarios: una segunda oleada de la pandemia y que la vacuna no llegue hasta el verano de 2022. En este caso, el valor de la compañía se desplomaría hasta límites peligrosos para su futuro y solo después comenzaría una lenta y gradual recuperación, según Morgan Stanley
Muchos analistas han planteado la necesidad de que la firma se replantee la salida a internet, aunque sea de manera temporal y con plataformas de terceros, como Aliexpress. Pero la cadena irlandesa se muestra reticente: no ve cómo combinar la venta de camisetas a dos euros con un servicio que envía cada pedido a la puerta de casa.
El movimiento de Inditex que puede ahogar a Primark
En medio de estas reticencias, la enseña de Amancio Ortega ha dado un golpe de efecto y ha decidido potenciar su firma 'low cost', Lefties, creando un canal propio de venta por internet.
El objetivo: hacer lo que Primark niega, es decir, vender esas camisetas baratas por internet y adaptarse al modelo de negocio que empieza a imponerse a pasos agigantados en el mundo de la 'nueva normalidad'.
A pesar de todo, la situación es mucho más fácil para Lefties que para Primark. Sobre todo, porque la enseña 'low cost' de Inditex puede aprovechar todo el canal online del resto de firmas del grupo sin tener que realizar grandes gastos en infraestructuras ni elevados importes por envío. Algo que Primark, por el momento sin esta estructura, puede permitirse.
Lefties, todavía, se considera como la 'hermana pequeña' de Inditex, puesto que es la única que no opera como marca propia y muchos de sus diseños son meras reediciones de Zara que realiza con materiales de coste más económico.
Pero el mundo que llega con la pandemia, en el que la crisis económica volverá a hacer este tipo de formatos como esenciales para el gran público, pueden provocar que esta marca suba como la espuma. Así es como se gestó el auge de Primark en la pasada crisis de 2008.
Por el momento, la cadena irlandesa ha alquilado varios almacenes donde guarda su stock de prendas, principalmente del pasado invierno y primavera. Confía en que su apuesta por los básicos haga atractiva su ropa en cualquier temporada, algo que nuevamente implica nueva incertidumbre.
Sea como fuere, lo cierto es que Primark llegará con la 'espinita' de la venta online mientras que su competencia se consolida en este canal. No solo por parte de Lefties, sino de otras firmas similares como Kiabi. Solo el tiempo dirá si Primark entra en el saco de empresas que un día reinaron y se quedaron atrás por sus reticencias a los cambios; o si realmente tenía razón en este movimiento.