El aguacate, también conocido como palta, es un tipo de fruta rica en grasas saludables y con gran cantidad de beneficios. El aguacate, además, se ha convertido en uno de los alimentos más populares gracias a su extensión en redes sociales, desde el niño emocionado y su "It's an avocado, thanks!" hasta las fotos más singulares de Instagram.
I just wanted to officially wish everyone a merry it's an avocado thanks season ????pic.twitter.com/4TyZzZZdS0
— BuzzFeed Canada (@BuzzFeedCanada) November 19, 2019
Esta fruta, además, contiene casi 20 tipos de vitaminas como la vitamina B9 o ácido fólico, las B5 y las B6. Asimismo, tiene también minerales, aunque en menor cantidad, como el magnesio, el cobre, el zinc o el manganeso.
Es un alimento muy nutritivo y una fuente vegetal de grasas monoinsaturadas ("grasas buenas") que se han relacionado con la reducción del riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares. Su consumo también puede reducir los niveles de colesterol y triglicéridos y su grasa puede ayudar a absorber los nutrientes del resto de alimentos vegetales. Asimismo, tienen antioxidantes con los que se puede reducir el riesgo de sufrir cataratas o la degeneración macular.
Y, aunque tiene gran cantidad de beneficios, no siempre lo preparamos de la manera que deberíamos, ya que preparar un aguacate no consiste en retirar la piel y el corazón del mismo.
Cómo preparar el aguacate
Al igual que hacemos con cualquier otra fruta o verdura, el primer paso es lavar la piel del aguacate. Sin embargo, puede no parecer importante o indispensable ya que la piel del aguacate no se come, pero según la Universidad de California en Berkeley, tan solo cortar el aguacate sin haberlo lavado podría desembocar en un traspaso de microorganismos hacia el interior, igual que sucede con otras frutas como el melón.
Además, las frutas y verduras suelen ser el origen de diversas intoxicaciones alimentarias; como en 2011, cuando un brote de listeria monocytogenes terminó con la vida de 33 personas y otras 143 tuvieron que ser ingresadas. En esta ocasión, aquel brote se relacionó con el consumo de melones.
No obstante, estos brotes son escasos si tenemos en cuenta el gran consumo de fruta y verdura que se produce a diario sin limpiar adecuadamente las pieles de los alimentos, error que solemos cometer también al ingerir aguacates. Además, también se recomienda lavar incluso aquellos alimentos que venden preparados y "prelavados".