Tras la reciente advertencia de tres generales retirados de Estados Unidos sobre un golpe de Estado en el país por parte del Ejército en 2024; ahora un profesor canadiense alerta sobre la posibilidad de que la primera democracia del mundo colapse en los próximos años.
El resultado de esta crisis podría ser auténticamente dramático: Estados Unidos podría convertirse en una dictadura en 2030. Así lo sostiene Thomas Homer-Dixon, director ejecutivo del Instituto Cascade en la Royal Roads University, en un artículo publicado en The Global and Mail.
"Para 2025, la democracia estadounidense podría colapsar, provocando una extrema inestabilidad política interna, incluida una violencia civil generalizada. Para 2030, si no antes, el país podría estar gobernado por una dictadura de derecha", indica en su tesis.
Para quienes creen que esta predicción es "ridícula", el autor canadiense les dice que en 2014 también parecía "absurda" la posibilidad de que Donald Trump se pudiera convertir en futuro presidente de Estados Unidos: "Hoy vivimos en un mundo donde lo absurdo se convierte en realidad y lo horrible es un lugar común", señala.
"Hoy, mientras observo la crisis de EE.UU., veo un panorama político y social con señales de advertencia"
Thomas Homer-Dixon lleva más de 40 años estudiando las causas de la guerra, la revolución, la violencia étnica y el genocidio. Durante casi dos décadas dirigió un centro de estudios sobre La Paz y los conflictos en la Universidad de Toronto.
"Hoy, mientras observo la crisis que se desarrolla en los Estados Unidos, veo un panorama político y social con señales de advertencia", sostiene el profesor, que alerta sobre el riesgo de que Estados Unidos "se está volviendo cada vez más ingobernable y algunos expertos creen que podría caer en una guerra civil".
En cuanto al debilitamiento de la democracia en Estados Unidos, Homer-Dixon señala una combinación de factores como "el estancamiento de los ingresos de la clase media, la inseguridad económica crónica y la creciente desigualdad a medida que la economía del país, transformada por el cambio tecnológico y la globalización". Considera, además, que "la inseguridad económica está generalizada en amplias franjas del interior del país, mientras que el crecimiento se concentra cada vez más en una docena de centros metropolitanos".
Homer-Dixon alerta de que en su país, Canadá, existe un peligro de desestabilización por contagio del país aliado: "Se avecina una tormenta terrible desde el sur y Canadá lamentablemente no está preparado. Durante el año pasado, dirigimos nuestra atención hacia adentro, distraídos por los desafíos de Covid-19, la reconciliación y los efectos acelerados del cambio climático. Pero ahora debemos centrarnos en el problema urgente de qué hacer respecto al probable desmoronamiento de la democracia en Estados Unidos. Debemos comenzar reconociendo plenamente la magnitud del peligro. Si Trump es reelegido, incluso en los escenarios más optimistas, los riesgos económicos y políticos para nuestro país serán innumerables".
A su juicio, "Trump y una serie de acólitos y aspirantes como Tucker Carlson, de FOX News y la representante de Georgia, Marjorie Taylor Greene, han transformado al Partido Republicado en un culto de personalidad casi fascista que es un instrumento perfecto para destruir la democracia". Si Donald Trump vuelve al poder, advierte, "será la bola de demolición que destruya la democracia; el proceso producirá un caos político y social".