Esperanza Aguirre ha visitado 'Herrera en COPE' días después de la declaración de Francisco Granados, en la que implicó de lleno a Aguirre en la supuesta financiación ilegal del PP madrileño. "No tengo nada de qué esconderme", espetó la expresidenta de la Comunidad de Madrid nada más iniciar la entrevista.
En ella, Aguirre ha defendido en todo momento su inocencia, destacando una y otra vez que su único error fue no vigilar como es debido la corrupción que rodeaba al partido, aunque acto seguido se justifica: "No me ocupé de la financiación porque había cuatro personas encargadas de eso. Yo jamás vi una cuenta. Era presidenta de la Comunidad y me tenía que ocupar de poner la enseñanza bilingüe en la escuela pública, de hacer doce hospitales nuevos, de ampliar el Metro...".
No obstante, Aguirre asegura que sentó a Granados y a Ignacio González en su despacho cuando la situación parecía insostenible: "A ambos les pedí explicaciones. Ambos dieron explicaciones cumplidas. Los jueces tendrán en este momento que decidir si son ciertas o no, pero yo era la presidenta de la Comunidad de Madrid, no un policía".
Al ser preguntada sobre por qué destituyó a Granados y no González, la exlíder del PP madrileño lo achaca a un proceso que nada tiene que ver con la corrupción, sino con una filtración de información política.
La falta de liquidez, obstáculo para querellarse contra Granados
Esperanza Aguirre ha confirmado a Carlos Herrera que no seguirá los pasos de Cristina Cifuentes, y no denunciará a Granados por injurias y calumnias. Uno de los motivos, porque no tiene "dinero para pagar a abogados y procuradores para las mentiras del señor Granados". El otro, porque "no ha aportado ninguna prueba".
La expresidenta recalca que Granados solo afirmó ante el juez que era "consciente" de su participación en la trama, sin poder asegurar nada, por lo que su declaración carece de valor: "¿Qué quiere decir 'soy consciente' si él era el Secretario General? Que lo pruebe. Cuando estuvo en la prisión preventiva dijo que no había habido financiación irregular. Ahora ha cambiado de estrategia, lo cual es legítimo. En el derecho español los imputados tienen derecho a mentir, pero el propio Fiscal General del Estado ha dicho que acusar sin pruebas es difamar".
Aguirre sostiene que Mariano Rajoy cree en su presunción de inocencia, y asegura no sentirse molesta cuando Cristina Cifuentes no puso la mano en el fuego por ella ante el propio Herrera en los micrófonos de la Cope la semana pasada: "En absoluto no me ha decepcionado. Dijo que esa expresión le parecía medieval y estoy de acuerdo".
