La especie humana tiene los días contados y se extinguirá en el año 2050, según un estudio dirigido por el exjefe de la Fuerza de Defensa Australiana, el almirante Chris Barrie y en el que han participado varios expertos del país oceánico.
En el escrito, titulado 'Riesgo de seguridad relacionado con el clima existencial: un enfoque de escenario', se señala que los efectos de la contaminación van a ser especialmente fuertes en las próximas décadas.
La sucesión de sequías, aumentos del nivel del mar y destrucción del medio ambiente serían las principales responsables de una gran crisis migratoria que desencadenaría una gran crisis a nivel de civilización, un colapso de la actual organización social humana.
Para ello, se remiten a la actualidad: "Los impactos del cambio climático en la alimentación y agua, la disminución de los rendimientos de los cultivos y el aumento de los precios de los alimentos provocados por la sequía, los incendios forestales y las fallas en las cosechas ya se han convertido en catalizadores de la ruptura social y ha desatado el conflicto en el Oriente Próximo, el Magreb y el Sahel, con fuertes influencias en la política europea", reza el informe.
El informe fue escrito por el director de investigación del Breaktrough National Center for Climate Restoration, de Melbourne. Con él, también ha participado Ian T. Dunlop, exejecutivo internacional de la indutria del petróleo, gas y carbón que actualmente ejerce como presidente de la Australian Coal Assotiation.
Por su parte, el almirante Chris Barrie, exjefe de las fuerzas de defensa de Australia, considera que el cambio climático es un riesgo muy serio: "Después de la guerra nuclear, el calentamiento global inducido por el hombre es la mayor amenaza para la vida humana en el planeta", asegura. Barrie recuerda también que nos dirigimos a un aumento de la temperatura media del planeta de 2ºC, algo que pone en jaque el futuro de nuestra especie.
El punto de inflexión: la década que se avecina
Mientras nada parece apuntar a un cambio relevante en nuestras emisiones contaminantes, el estudio fija la próxima década (2020-2030) como el "punto de inflexión" en el que la humanidad podrá comprobar que 'algo no va realmente bien'.
La falta de medidas efectivas para atajar la emisión de gases contaminantes llevará a un fuerte efecto invernadero que derivará en un rápido aumento del nivel del mar provocado por el derretimiento de la capa de hielo de Groenlandia y la "pérdida generalizada del 'permafrost' y la sequía y muerte a gran escala del Amazonas".
Con ello, el informe destaca que "el 35% de la superficie terrestre global y el 55% de la población mundial estará sujeta a más de 20 días al año de condiciones de calor letal, más allá del umbral que cualquier ser humano puede soportar".
La zona tropical, que actualmente goza de uno de los climas más adecuados para albergar vida, se convertiría en un área inaccesible como consecuencia de las altas temperaturas.
Esta zona es muy poblada, ya que a estas latitudes se encuentran algunas de las ciudades más pobladas del planeta como Mumbai, Yakarta, Hong Kong, Lagos, Bagkok o Manila. "Es posible que más de mil millones de personas deban ser reubicadas y, en los escenarios de alto nivel, la escala de destrucción está más allá de nuestra capacidad de modelar, con una alta probabilidad de que la civilización humana llegue a su fin".
