Si hay algo que nos "toque" el ADN a todos los españoles eso es, sin duda, Gibraltar. Ya pueden llamarnos vagos, tardones, pobres o follaburros, que prácticamente nos quedamos sin decir ni 'mu'. Pero como venga un británico a decirnos que Gibraltar es suyo... nos sale la vena de Bea la Legionaria y nos ponemos como locos a defender "lo que es nuestro". Porque como diría La Legionaria, Gibraltar no nos lo quita "naide" -sic-.
El último gesto patriótico en torno a la roca ha llegado en forma de troleo digital. Al más puro estilo de la guerra tecnológica que vivieron Estados Unidos y Corea del Norte; una cadena de mensajes en WhatsApp lleva la friolera de cuatro años intentando cambiar los resultados de una encuesta británica en la que se preguntaba a los lectores sobre la soberanía del Peñón.
Y lo cierto es que, a pesar de que nos llamen vagos y muchos dentro de España consideren que en este país falta patriotismo; la vena nacional nos sale en seguida con este asunto y nos movilizamos bien rápido. Fue un 5 de agosto de 2013, cuando el (inocente) diario The Telegraph lanzó una encuesta en plena escalada de tensión entre ambos países.
Con los primeros 10.000 votos contabilizados, la opción que abogaba por la soberanía británica ganaba con el 85% de los votos. Sin embargo... a los pocos días, los resultados cambiaban de una manera vertiginosa. Poco a poco, España remontaba por goleada y, partiendo de una posición muy negativa (y con todo en su contra), terminaba ganando por goleada.
Un diario británico mantenía una encuesta en la que se pedía la soberanía de Gibraltar para España. ¿Gol en propia puerta? ¿Qué fallaba? Pues que en realidad, se había iniciado una campaña en las redes sociales a la que directamente apuntó el periodista del periódico, Barney Henderson. El británico afirmaba que la culpa era de la "armada digital" (sí, aún nos siguen recordando el ridículo de la "armada invencible"), con la que varios españoles se habían movilizado a través de Facebook y Twitter.
La cosa no se quedó ahí: el periodista salió a la palestra unos meses después para llegar a afirmar que el propio Ministerio de Defensa español, Pedro Morenés, había estado fomentando desde su despacho el boicot a la encuesta. Se basaban en que la mayoría de votos a favor de España procedían de los ordenadores de los funcionarios de dicho ministerio, en concreto 5.000 de ellas. Morenés jamás dio ninguna respuesta (¿quien calla otorga?), pero a pesar de ello, el diario no cerró la encuesta.
El Gobierno de Gibraltar truncó nuestros planes troleadores
A pesar de que el trabajo de España a la hora de trolear la encuesta fue legendario (en concreto llegó a ganar la soberanía del país ibérico con hasta un 92,5% de los votos), finalmente el gobierno gibraltareño realizó un movimiento con el que troleó nuestro propio troleo.
En una entrevista con The Telegraph, un portavoz del Gobierno del Peñón se quejó de la situación: "Cada vez que Gibraltar es noticia, los medios españoles usan esta encuesta falseada en nuestra contra", llegaron a afirmar.
Los medios británicos se hicieron rápidamente eco de sus declaraciones e iniciaron una ofensiva para dar la vuelta a los resultados mostrado por The Telegraph, que debe de contar con la encuesta entre sus páginas más vistas (sin dudarlo).
Y hay que reconocer que los británicos se han movilizado especialmente rápido. Tanto, que en mayo de 2017 la participación se encontraba en los 5,7 millones de votos y se había materializado un temido sorpasso: Gran Bretaña ganaba con un 53,11% de los votos, frente al 46,89% de España.
Mientras tanto, los españoles han vuelto a la carga con el fin de retrolear la encuesta. La campaña a través de whastapp se ha vuelto a activar y ya se puede apreciar una remontada. El diario británico ha confirmado que, finalmente, cerrará la pregunta de forma definitiva a finales de mayo. Aún queda tiempo de votar.
