Estamos en una pretemporada eurovisiva de muchas apuestas vanguardistas, pero eso no quita que las delegaciones más tendentes a lo clásico sigan en sus trece. Algo así pasaba ayer en Liublana, donde la RTVSLO celebró la finalísima de su clásico 'EMA' de cara a Eurovisión 2020.
En una final de las de antes, donde antes de la gala apenas habíamos oído unos segundos de cada canción, un total de doce propuestas se batieron el cobre con un billete para Rotterdam en juego. En un año donde la RTVSLO se inventó el 'EMA Fres', una fase previa de artistas jóvenes al más puro estilo del Festival de Sanremo Giovanni, la victoria se ha terminado quedando en una voz puntera de la industria eslovena, la de una Ana Soklic que llevará la balada 'Voda' a Países Bajos gracias a la decisión del televoto esloveno.
Entre la selección de artistas, encontramos nombres conocidos como los de Tinkara Kovac (Eurovisión 2014) o Lina Kuduzovic, representante de Eslovenia en Eurovisión Junior 2015, la que puede presumir del mejor resultado histórico de los eslovenos en la esfera eurovisiva con un tercer puesto aquel año.
Una balada ambiental que ya tiene competidoras
Si bien el nivel musical del EMA 2020 no era malo, no había ninguna canción que de partida te aportara un efecto sorpresa. Ante esto, tanto primero el jurado esloveno como luego el público ha apostado por una balada que perfectamente podría estar firmada en los primeros 2000.
Aupada por la gran voz de Ana Soklic, 'Voda' cumple con todos los patrones de una balada eurovisiva, la que apenas con unas doce canciones desveladas ya cuenta con competencia directa.
De subidas y bajadas y con una instrumentación cuidada pero que ya hemos oído muchas veces, la eslovena tendrá que vérselas de inicio con Noruega en su semifinal, la primera, así como con otras canciones como la de Albania, la que estando en la segunda semi promete con su revamp una canción similar a la eslovena.
¿Podrá pasar la semifinal? El directo hace crecer mucho a la canción y nos queda la duda de como 'vestirán' la canción en el Ahoy Arena. A veces una buena canción solo no vale para obtener éxito en Eurovisión, y a Eslovenia le quedará esperar a ver lo que queda y pulir una balada correcta pero no sorprendente.
