Estrenada el 25 de diciembre de 2020, 'Los Bridgerton' se ha convertido en el nuevo éxito de Netflix. Creada por Chris Van Dusen bajo la producción ejecutiva de Shonda Rhimes, la serie ha conseguido ser el mejor estreno de la historia de la plataforma de vídeo bajo demanda. Entre los elementos que han hecho posible este fenómeno destacan la cuidada fotografía, el vestuario y los escenarios en los que se ambienta la serie, que recrean a la perfección la Inglaterra de principios del siglo XIX.
Además, si por algo ha llamado la atención esta ficción protagonizada por Phoebe Dynevor, Jonathan Bailey y Regé-Jean Page es por mostrar explícitamente escenas en la que el sexo toma todo el protagonismo. De hecho, durante los ocho capítulos que forman la primera temporada acompañamos a la protagonista en su despertar sexual, un camino en el que, poco a poco, va descubriendo los secretos del sexo y todo aquello que le produce placer.
Así pues, las secuencias más tórridas y eróticas no han pasado desapercibidas por los espectadores, algo que no es de extrañar porque están perfectamente planteadas para lograr subir la temperatura a cualquiera. Si quieres recordar los momentos más calientes de 'Los Bridgerton', desde Los Replicantes te lo ponemos fácil porque hemos recopilado las mejores escenas de sexo.
1 Anthony y Siena, pasión entre bambalinas
La primera relación que descubrimos en el episodio inicial es la de Anthony Bridgerton y Siena Rosso, pero la suya es una historia de amor de amantes, de esas que mantienen a escondidas por el qué dirán. Ella es una cantante de ópera que reniega de todas las imposiciones que tienen las señoritas de la clase alta, a Siena le da igual mantenerse pura hasta el matrimonio y prefiere disfrutar de encuentros sexuales con Anthony, del que está completamente enamorada. Por su parte, no sabemos si él siente el mismo amor porque siempre antepone a su familia, aunque le promete cuidarla y se muestra totalmente entregado a los momentos de pasión.
2 Daphne y la masturbación
Ser mujer y pertenecer a la clase alta londinense del siglo XIX significa que el sexo es un tema tabú. Hasta que no se convierten en la esposa de un noble desconocen cómo funciona este mundo. No obstante, como cualquier ser humano, Daphne tiene sus necesidades y comienza a explorar los beneficios de la masturbación. La secuencia nos muestra a la joven entregándose al placer individual mientras en su mente recuerda algunos momentos compartidos con el duque de Hastings, imágenes que avivan ese despertar sexual de la joven y que la llevan a un momento de éxtasis.
3 La noche de bodas de Daphne y Simon
La noche de bodas es uno de los momentos más esperados para los novios, sobre todo si te has criado en pleno siglo XIX, donde el sexo estaba totalmente prohibido antes del matrimonio, especialmente para las mujeres. Daphne vive con emoción la llegada de la noche, por eso no comprende que su marido solicitara habitaciones separadas. Finalmente confiesan sus sentimientos, consiguen entender sus deseos y disfrutan de una apasionada y romántica sesión nocturna de sexo que se convierte en la primera vez para ella.
4 Sexo bajo la lluvia
Después de que Daphne perdiera la virginidad en su noche de bodas, la joven decide recuperar todo el tiempo perdido e invierte cada segundo en disfrutar del placer del sexo. Cualquier momento es bueno para dar rienda suelta a la pasión, sobre todo si fuera está lloviendo y encuentran el lugar perfecto para resguardarse de la tormenta. Quien dice evitar mojarse de la lluvia también dice utilizar ese sitio y esa ambientación proporcionada por la naturaleza para dejarse llevar y continuar disfrutando de los beneficios del sexo.
5 Con los primeros rayos de sol
Estrenarse en el mundo del sexo la noche de bodas solo fue el pistoletazo de salida a una nueva vida sexual de lo más activa para Daphne. Encontrarse en plena luna de miel fue un aliciente más para que la pareja no perdiese ni un segundo para hacer el amor cada vez que podían. Por la mañana recién levantados fue uno de los momentos elegidos para dejar que sus cuerpos se fundiesen, disfrutando así de una jornada de sexo con los primeros rayos de sol entrando por la ventana.
6 Voyeurismo en el lago
Una vez cogido el ritmo y aprendida la mecánica, Daphne y Simon debieron pensar que tenían que aprovechar cualquier lugar para practicar sexo. Tanto es el deseo que sienten que hasta no dudan en hacer el amor a las orillas del lago y a plena luz del día, es decir, a vista de todos. Para el duque no fue un obstáculo que los sirvientes o cualquier curioso pudiese observar la tórrida escena y verle como su madre le trajo al mundo. A ellos solo les importaba saciar esas ganas descontroladas de hacer el amor.
7 Sexo en la biblioteca
El siguiente escenario elegido para practicar sexo descontrolado es la biblioteca de la casa. Apoyados en una escalera y rodeados de libros, Simon practica sexo oral a su mujer, preliminares que acaban con ambos haciendo el amor contra la estantería. Lo que desconocen Daphne y el duque es que no son los únicos atentos a ese momento de calentón, las doncellas se encuentran justo detrás de las puertas escuchando con toda la atención del mundo y entre risas varias lo que está sucediendo al otro lado.
8 Sexo en el despacho
Siguiendo con su tour sexual por toda la casa y sin importarles ni lo más mínimo que las doncellas o cualquiera puedan escucharles, Daphne irrumpe en el despacho de su marido y no puede evitar lanzarse a su cuello. Tras varios besos apasionados y sin tener tiempo para quitarse toda la ropa, finalmente acaban haciendo el amor encima del escritorio y entre todos los documentos del duque. La escena sucede rápido, pero el momento de calentón antes de llenar el estómago no se lo quita nadie.
9 Sexo a traición
En más de una ocasión Daphne reconoce que no tiene prácticamente idea sobre sexo. Su madre nunca le ha explicado cómo funciona y ella así lo ha hecho saber. Cuando llegó el momento de pensar en tener hijos, no sabía muy bien cómo tenía que proceder para quedarse en cinta y, tras pedir a su doncella que se lo explicase, por fin comprende que su marido ha estado evitando todo el rato que ella se quedase embarazada. Enfadada tras el descubrimiento, Daphne se acuesta con el duque, toma las riendas del acto y consigue que Simon eyacule dentro de ella, provocando así la primera pelea del recién estrenado matrimonio.
10 Daphne y Simon, sexo oral en las escaleras
El sexo de reconciliación no ha faltado tampoco en la relación entre Daphne y el Duque. Aunque no se llegó a consumar por completo porque las discrepancias entre ambos todavía seguían, nos regalaron una escena de lo más caliente en plena escalera de su lujosa casa. Simon colocaba a su mujer sobre los escalones para practicarle sexo oral mientras la joven intentaba gestionar el placer que le estaba produciendo su marido, todo ello en una secuencia con un plano cenital que nos permite ver a la perfección ese momento de pasión sexual.
11 Anthony y Sienna a escondidas
La hipocresía de Anthony al pedirle a sus hermanos que no hagan justo lo que él hace con Siena no fue ningún impedimento para que el mayor de los hermanos Bridgerton siguiera con sus encuentros sexuales con la cantante de ópera. En esta ocasión, en el último episodio de la temporada, tras intercambiar miradas de deseo y lujuria, aprovechan que ambos han acudido al mismo evento y que todos están atentos al combate de boxeo para escaparse y volver a dejarse llevar por la pasión. La parte trasera de las gradas se convierte en el lugar perfecto para hacer el amor sin ser descubiertos.
12 El de la concepción
Tras sufrir un altibajo en su relación después de que ella le utilizara y él le engañara, finalmente Daphne y Simon llegan a un acuerdo y deciden reconciliarse. La pareja vuelve a disfrutar de momentos de intimidad y, por fin, el duque aceptar tener sexo para concebir. Quizá no es el polvo más emocionante de la historia ni el más pasional que hemos visto a lo largo de la temporada, pero es el inicio de una nueva vida para ellos, un encuentro que se traduce en un bebé que llaga al mundo en los últimos instantes de la temporada.