El caso se encuentra bajo secreto de sumario y el único sospecho, Nelson David, está en prisión provisional, lo que provoca que las informaciones relacionadas con el asesinato en serie de personas homosexuales en Bilbao estén siendo muy contadas en los últimos días.
El consejero de Seguridad del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, ha adelantado algunas novedades este miércoles 11 de mayo y ha indicado que, en estos momentos, se maneja el móvil económico "como principal razón", pero no se puede descartar que puedan existir "factores de odio".
"También pueden ser ambos, es decir, una cosa no quita la otra, y puede ser que les hubieran querido robar y, al mismo tiempo, haya un fondo de odio hacia el colectivo", ha añadido el consejero de Seguridad y vicelehendakari primero.
Erkoreka ha insistido, en una entrevista emitida en ETB1, en que la investigación va a ser "larga" y que "no se va a esclarecer del todo en meses", por lo que ha pedido "dar tiempo a la investigación judicial y policial" y "actuar con prudencia, porque es un caso muy delicado".
"Una vía al alarmismo"
La magnitud del caso sigue siendo una incógnita, puesto que se están investigando cuatro muertes, y se analiza la vinculación de otros tres hombres cuyo fallecimiento se atribuyó, en un primer momento, a causas naturales. El consejero de Seguridad ha considerado que responder a la pregunta de cuántos asesinatos ha podido haber "puede ser una vía al alarmismo", por lo que "mientras dure la investigación y las hipótesis sean hipótesis, no podemos vender cosas como si estuvieran probadas".
"Debemos ser prudentes porque, si se demuestra que lo que tenemos entre manos es una trama, puede ser delicado y peligroso. Por lo tanto, hemos pedido a los medios que sean prudentes y nosotros también vamos a actuar así, porque la investigación tiene un largo camino que recorrer", ha explicado.
El consejero también ha explicado que la persona detenida llegó al País Vasco desde Bruselas y que, mientras estaba establecido en la comunidad autónoma, también visitó otros lugares de España, por lo que también se investiga a través de la coordinación policial "lo que podría haber hecho en esos otros lugares", en referencia a la Comunidad de Madrid y la costa del Levante.