Una mujer y su madre biológica pudieron encontrarse por primera vez después de que fuera dada en adopción cuando era un bebé, el vídeo que muestra un bonito reencuentro ha visto la luz después de varios meses, ya que el encuentro ocurrió en septiembre de 2022.
Laura Mclean creció sabiendo que había sido adoptada, y siempre tuvo curiosidad por saber quién era su familia biológica, pero no tenía ningún dato que pudiera ayudarla en la búsqueda. Fue adoptada nada más nacer en 1990, su madre biológica la había tenido a los 18 años y quería una vida mejor para ella.
Un test de ADN en casa
La curiosidad llevó a esta mujer británica a empezar una búsqueda más intensiva el año pasado. Para ello, decidió hacerse una prueba de ADN en el portal 23andMe, una de las muchas empresas de genómica personalizada que empezaron a comercializarse en los últimos años, prometiendo obtener resultados sobre el origen geográfico de nuestros ancestros.
Otros servicios que incluyen este tipo de empresas, es cotejar las muestras de ADN con las de otros usuarios, pudiendo encontrar así coincidencias en los códigos que demuestran distintos grados de parentesco. Después de meses de búsqueda en Google y Facebook, Laura decidió utilizar este servicio y, después de un tiempo, recibió un correo electrónico que le notificó de una coincidencia con otro usuario.
Una familia en Canadá
La muestra de ADN de Laura había coincidido con la de una mujer en Canadá, la notificación decía que se podría tratar de una medio-hermana, pero resultó ser su tía. Después del hallazgo, la mujer de canadá, Leanne MacDonald, de 35 años, se puso en contacto con ella en un correo electrónico revelando su parentesco, y diciendo: "Te hemos estado buscando durante años".
Pocos días después, Laura Mclean pudo ponerse en contacto con su madre biológica, Janine Henderson, de 50 años, a través de una videollamada en la que las dos se encontraron muy emocionadas de conocerse al fin. Debido a la gran conexión, la hija decidió organizar un viaje sorpresa para ver a su madre en persona.
Un emotivo reencuentro
Con el apoyo, tanto de su familia adoptiva, como de su familia biológica y su pareja, Laura pudo volar hasta Ontario, Canadá y meterse en una caja a escondidas para sorprender a su madre. Después del esperado reencuentro, la mujer de 32 años declaraba: "Pasé por una lavadora de emociones. Fue abrumador, pero me sentí feliz, ningún ser humano podría pasar por eso y no encontrarlo abrumador. No sabía lo que me faltaba hasta que me puse en contacto con mi familia biológica".
Por su parte, Janine también se encontró muy emocionada: "Le digo a Laura todo el tiempo, mis palabras aún no han alcanzado mis emociones. Me han dado una segunda oportunidad y no mucha gente tiene esa oportunidad. Mi familia se siente completa".