Buscar
Usuario

Noticias

La descuartizadora Emilia Basil: servía los genitales de su amante en su restaurante

Emilia Basil reconoció todos los hechos ante los investigadores y nunca mostró arrepentimiento por el asesinato.

La descuartizadora Emilia Basil: servía los genitales de su amante en su restaurante

Emilia Basil era conocida en su entorno como 'La Turca'. Todo, porque el restaurante que regentaba tenía el nombre de 'Yamile', que en origen árabe significa "mujer bella, graciosa". Pero lo que se conocía como un amable matrimonio iba a despertar las peores páginas de la novela negra de la década de 1970 cuando Emilia asesinó a su amante estrangulándolo brutalmente, descuartizándolo y sirviendo sus restos en los platos que vendía. Sus testículos fueron la oferta estrella.

El caso estalló el 28 de marzo de 1973, cuando una vecina del barrio de San Cristóbal (Buenos Aires, Argentina), alertó del "mal olor" que siempre desprendía la basura que tiraba Basil en la puerta del local y la denunció. El horror salió a la luz después, cuando un par de efectivos acudieron al lugar y hallaron el origen del hedor: el torso de un hombre completamente descuartizado.

Emilia Basil, durante una vista judicial
Emilia Basil, durante una vista judicial .

La investigación rápidamente apuntó a Emilia, una mujer nacida en Beirut que se había hecho muy conocida en el barrio por traer la gastronomía árabe a la capital. Muchos de sus empleados eran personas muy populares, que trabajan en la conocida emisora Telefé, tan solo ubicada a unas calles de su establecimiento.

Cuando la investigación no dejaba lugar a duda sobre su implicación, confesó el crimen de su amante. Se trataba de José Petriella, un hombre italiano de 60 años con el que mantenía una relación extra matrimonial, y al que aseguraba haber matado porque le amenazaba con desvelar todo a su marido.

La mujer no mostró en ningún momento arrepentimiento y siempre expresó que veía como una salida viable matar a su amante para que cesara el chantaje y ocultar que estaba siendo infiel a su marido. "No tenía a nadie que cargara los bultos del cadáver en un coche. Esa fue mi desgracia, si no puedo asegurar que no me hubieran descubierto", expresó ante el juez, a modo de lamento. Fue condenada a 10 años de cárcel.

Emilia Basil y su relación con Petriella

Emilia Basil nació en Líbano en 1911 y llegó a Argentina en la década de 1940 en busca de oportunidades. Con el tiempo conoció a Felipe Coronel Rueda, con quien se casó y tuvo tres hijas. La familia se mudó después e instaló un restaurante, pero como no tenían ahorrado el suficiente dinero negoció con el dueño un acuerdo hasta saldar la deuda. Era José Petriella, propietario original del establecimiento.

En 1973 llegaron las malas noticias. El negocio no estaba facturando todo lo necesario y fue entonces cuando Basil contactó con Petriella. La relación fue marchando durante varios meses, hasta que 'La Turca' decidió poner fin asesinándole.

Emilia Basil estaba acusada de asesinar a un hombre, descuartizarlo y servir sus restos en un restaurante
Emilia Basil estaba acusada de asesinar a un hombre, descuartizarlo y servir sus restos en un restaurante .

El hombre cada vez la reclamaba con mayor frecuencia e incluso empezó a acosarla. Pero todo rebasó cuando Basil le exigió continuar manteniendo relaciones sexuales amenazándole con desvelar todo y exigir el total de la deuda de golpe.

La mujer primero empujó a su amante y después, como insistía en llevarla a la cama, le pasó un cordón por el cuello y apretó con fuerza hasta que vio que estaba muerto. Posteriormente, puso el cuerpo en un cajón de madera y cuatro días más tarde lo sacó a la calle con el resto de la basura para deshacerse de pruebas.

Pero una vecina denunció el mal olor y la Policía tan solo encontró el torso. Surgió entonces la duda sobre el destino del resto de su cuerpo, y fue entonces cuando se desvelaron los detalles más turbulentos de la historia de este crimen.

Platos en su restaurante

Emilia había descuartizado el resto del cuerpo, luego lo hirvió en varias ollas y después sirvió los restos como parte de los platos que ofrecía a los clientes de su restaurante. "Mi marido y mis hijas no tuvieron nada que ver, no sabían nada. Fui sola", explicó ante los jueces, donde se mantuvo firme: "Lo hice y lo volvería a hacer una y mil veces".

Durante su confesión reconoció todo tipo de detalles: "Lo ahorqué, descuarticé y herví su cabeza tres días seguidos. Me cansé de mirarla mientras se hallaba en ebullición. Lo hice y lo volvería a hacer". Sus restos fueron a parar a los platos de su carta, según cada miembro de su cuerpo.

La Justicia finalmente condenó a Emilia a una pena de 10 años de cárcel por homicidio simple y pudo salir con libertad condicional en noviembre de 1979. Desde entonces poco se supo sobre ella, pero su historia ha permanecido en la memoria y fue recuperada en la serie argentina 'Mujeres asesinas' de la cadena Eltrece.

Artículos recomendados

Artículos relacionados
Contenidos que te pueden interesar