Impedir que los menores vean 'El Juego del calamar'. Esa es la recomendación que han lanzado el Consell de l' Audiovisual de Catalunya (CAC) y la Consejería de Cultura de la Comunidad de Madrid ante el éxito que esta cosechando esta producción de Netflix.
El presidente del CAC, Roger Loppacher, ha pedido que se exponga a los menores a "contenidos inadecuados" y ha subrayado a los padres que todas las plataformas ofrecen con diversos sistemas técnicos para conseguir dicho propósito.
En un comunicado, el organismo ha recordado que 'El juego del calamar' muestra una señalización, decidida por Netflix, en la que advierte de que no se trata de un contenido recomendado para menores de 16 años. Además, ha indicado que esta indicación se aplica también en países europeos de nuestro entorno.
El presidente del CAC señala que los menores de 16 años "no tendrían que ver la serie, atendiendo a que contiene contenidos perjudiciales" y ha animado a las familias a seguir la señalización y usar los sistemas de control parental que ofrece la plataforma.
Un producto "excelente pero no apto para niños"
Madrid se pronuncia en el mismo sentido. La consejera de Cultura, Turismo y Deporte de la región, Marta Rivera De la Cruz, ha opinado que 'El juego del calamar' es un "producto excelente", pero ha recordado que no es apto para niños.
La titular de Cultura se ha pronunciado en estos términos al ser preguntada por el hecho de que el equipo docente del colegio infantil y de Primaria, Teresa de Calcuta de San Sebastián de los Reyes, haya enviado una circular a todas las familias advirtiendo de "actitudes y juegos" relacionados con la serie entre estudiantes.
De la Cruz ha señalado que la serie está "correctamente rotulada, donde se aclara que es una serie para mayores de 16 años" y ha añadido: "Ahí entra lógicamente el control de las familias. Los niños no pueden ver todo".
Casos entre alumnos
Los casos de alumnos que imitan las conductas que aprecian en la serie 'El juego del calamar' se repiten en varios centros, según denuncian sus responsables. Así se ha detectado, por ejemplo, en la Escuela de Educación Infantil y Primaria FEDAC de Montcada i Reixach (Barcelona).
La mayoría tienen conocimiento de la serie por plataformas como YouTube, TikTok o incluso por comentarios que sus padres lanzan en conversaciones.La profesora Anna Martori señala que un grupo de 15 alumnos de segundo de primaria (entre seis y siete años) jugaban al 'luz roja, luz verde', el pica pared o el escondite inglés tal y como aparece en la serie.
"Había un niño que pa 'paraba' y otros dos que vigilaban, y cuando uno se movía cuando no debía, simulaban dispararlo con sus manos imitando una pistola, y este se quedaba estirado hasta acabar el juego", señala.
Un juego reeditado que provoca alarma ahora entre los docentes porque "ellos no son conscientes de lo que implica lo que sucede en la serie, no se dan cuenta de que, quien muere, lo hace de verdad, mientras que ellos están en un mundo paralelo en el que se levantan y luego siguen jugando; pierden el sentido real de la serie", indica.
