Terremoto en El Corte Inglés. Los rumores finalmente se han materializado y Marta Álvarez se convertirá en la próxima presidenta de El Corte Inglés en sustitución de Jesús Nuño de la Rosa. Ya no habrá impedimentos, puesto que la Justicia ha rechazado la demanda interpuesta por María Antonia Álvarez, madre de Dimas Gimeno, con la que pretendía anular la presidencia de Marta. El juez, además, le ha condenado a pagar las costas.
A diferencia de lo sucedido con la salida de Dimas Gimeno, el relevo de Nuño de la Rosa se producirá sin polémicas. Y lo hará, porque en una decisión completamente inédita en el mundo empresarial, el actual presidente habría pedido formalmente volver a las funciones que desempeñaba antes de su ascenso en el grupo. Eso sí, mantendrá el mismo sueldo y no habrá modificaciones en su contrato, que contempla una indemnización de tres años, alrededor de los seis millones de euros, según desvela El Confidencial.
De la Rosa seguirá ejerciendo como consejero delegado, con máximas responsabilidades sobre las filiales del grupo que representan un 20% del volumen de negocio. El todavía presidente también asegura, a quien le quiere oír, que no se respeta su liderazgo y sus intenciones de reformar la compañía, llegando a calificar su situación de "insostenible".
Si todo sigue como se espera, el nombramiento de Marta Álvarez debería producirse durante el último viernes del mes de agosto, fecha en la que la empresa presenta sus resultados a los medios. Se habla de una "transición ordenada", aunque hay dudas sobre lo que hará el inversor catarí Sheikh Hamad bin Jassim Bin Jaber al Thani, que ostenta un 10% del capital y que ya se abstuvo en los anteriores nombramientos.
Ese es, precisamente, uno de los mayores escollos de la operación. Aunque posee un 10%, el inversor árabe tiene la liquidez suficiente para evitar cualquier posible imprevisto que pueda dar al traste con el futuro de la empresa, que actualmente enfrenta una deuda mastodóntica de 3.600 millones de euros. Por ello, su permanencia sería vital para la empresa.
Juicio por adopción
La decisión ha sido anunciada durante la semana en la que se espera conocer la sentencia que debería ratificar o anular la adopción de las hermanas Álvarez por parte del expresidente de El Corte Inglés. Un juicio que finalmente ha salido a favor de las hermanas Álvarez.
Tanto Marta Álvarez Guil como Cristina, fueron adoptadas por su padre cuando ambas habían pasado los 40 años y ya tenían hijos. No hay constancia de que ambas hubieran vivido con Isidoro antes de cumplir la mayoría de edad, el punto al que se anclan, entre otros, los miembros que comparten lazos sanguíneos con la familia fundadores de los grandes almacenes.
Si se hubiera anulado ese proceso, las hermanas Álvarez dejarían de ser herederas universales y perderían la mayoría de su representación en El Corte Inglés. Todo ello podría devolver a la presidencia a Dimas Gimeno, como esperan los díscolos de las actuales dueñas de la empresa del triángulo verde, aunque se trata de una situación con pocas posibilidades de prosperar.
En el caso de que finalmente se avalase la adopción, las hermanas Álvarez tendrían prácticamente vía libre para imponer sus criterios. Ambas controlan alrededor del 60% de la compañía y se espera que Cristina pase a presidir la Fundación Ramón Areces, clave en la guía del gobierno corporativo.
Incertidumbre
Con una situación tan delicada en las cuentas y la falta de aplicación de los planes de reformas, la incertidumbre sobre el futuro de una empresa que necesita reinventarse urgentemente es máxima.
Nadie quiere vivir la experiencia de Galerías Preciados y, ciertamente, El Corte Inglés tiene los recursos y el personal necesario para volver a brillar como en el pasado, tan solo necesita estabilidad en su estructura y buena voluntad para recuperar objetivos.
Todo lo que suceda a partir de ahora será crucial para una de las empresas sistémicas de España, una empresa en la que trabajan alrededor de 100.000 personas y con una gran implantación territorial.