El Corte Inglés continúa con su plan de cierres y venta de centros comerciales con el objetivo de reducir su deuda y adaptarse a las nuevas tendencias del mercado, que apuestan por una mayor venta online y menor venta en superficie.
En el marco de esta operación, la enseña española de grandes almacenes continúa ejecutando su plan de cierres: el próximo centro comercial que bajará definitivamente la persiana será El Corte Inglés de la calle La Moneda de Burgos.
La previsión de cierre de este centro comercial es el 15 de mayo, aunque la fecha podría variar unos días en función de la rapidez con la que se acometan los traslados de las secciones de Perfumería y Relojería que todavía se ubican en el interior del centro comercial, en la primera planta del edificio y que todavía no se habían mudado por cuestiones de organización interna, según publica el diario local Burgos Conecta.
El cierre de este emblemático centro comercial se produce meses después del cierre definitivo del otro centro histórico ubicado en la calle Vitoria y el traslado de la mayor parte de la actividad al inmueble ubicado entre las calles La Moneda y Almirante Bonifaz, que ahora se clausura definitivamente.
Una vez se cierre definitivamente este centro comercial, el inmueble quedará completamente cerrado y sin ninguna propuesta de futuro. Se trata de patrimonio en propiedad de la empresa y todavía no se ha decidido cuál será su destino.
En este sentido, se barajan tres posibilidades para los dos centros clausurados: ambos podrían ser utilizados para otros negocios del grupo (por ejemplo, como almacén de venta online), podrían ser alquilados para alguna cadena comercial que esté interesada en instalarse allí o, llegado el caso, también vendidas para cualquier tipo de uso.
Por el momento, no se ha tomado ninguna decisión y previsiblemente no se adoptará ninguna decisión a corto plazo, ya que El Corte Inglés todavía debe barajar muchas opciones, como valorar su reposicionamiento comercial en Burgos, donde ahora centralizará toda su actividad comercial en el complejo Parque Burgos.
Cierres ejecutados
Hay causas variadas en la ejecución de los cierres, pero especialmente se centran en la necesidad de cortar pérdidas de algunas tiendas y reducir la deuda del grupo, que en el cierre del primer semestre de 2021 estaba en 3.940 millones de euros. Ha habido cierres diversos, como Francesc Macià (Barcelona), Linares (Jaén) o El Tiro (Murcia).
Otros, han sido reconvertidos con diversos formatos. El centro comercial de Arapiles (Madrid), Sevilla Este o Guadalajara, por ejemplo, han abandonado el formato tradicional de gran almacén y ahora cuentan con el formato outlet en el que venden artículos de temporadas pasadas a precios rebajados. Una estrategia del grupo para sacar partido a su stock y llegar a un nicho de mercado mucho más amplio. Estos centros sí mantienen algunos servicios auxiliares del grupo, como el supermercado, el restaurante o la agencia de viajes.
Otro centro, como Eibar, se ha reconvertido en una 'dark store', un almacén centrado únicamente en la venta online y al que no puede acceder el público general. Y queda duda sobre el futuro de Arroyosur (Leganés, Madrid), que iba a ser reconvertido en un centro comercial al uso y cuya reforma quedó paralizada por la pandemia.