El Corte Inglés se encuentra en pleno proceso de cierre de establecimientos para equilibrar sus cuentas y reformar su modelo de negocio. El objetivo: adaptarse a las nuevas tendencias del comercio.
En este plan, la firma de grandes almacenes ya está liquidando todo el stock de un nuevo centro que cerrará, previsiblemente, antes de este mes de octubre: se trata del centro de Bricor que la firma mantiene junto a su centro comercial de Constitución, en la calle Menéndez Pelayo de Valladolid.
La operación se produce en mitad del proceso de cierre generalizado de Bricor, la firma de bricolaje abierta durante la burbuja del ladrillo que no ha generado beneficios en ninguno de sus ejercicios. Los movimientos del triángulo verde apuntan a que esta firma, si se mantiene, lo hará con pequeños espacios dentro de sus centros.
El cierre de este establecimiento se une al cierre del centro anexo a Constitución, otro edificio en el que la firma mantenía secciones como Tecnología, Electrodomésticos, Telefonía o Papelería. Ya ha cerrado todas las secciones excepto la papelería, que clausurará en octubre para aprovechar toda la vuelta al cole.
Todos los departamentos clausurados irán ahora al centro principal, el centro comercial de Constitución, que aglutinará todos los espacios que la firma cerrará en octubre en la capital castellana y leonesa.
No es el único cierre que está en marcha
El cierre del anexo de Constitución se suma al cierre definitivo del centro comercial de Francesc Maciá de Barcelona, un edificio de cinco plantas sobre rasante con un sótano comercial en el que se encuentran departamentos de Moda, Zapatería, Tecnología, Deportes, Hogar y un Supermercado.
La enseña de grandes almacenes tiene como plazo hasta el próximo 31 de diciembre para abandonar el centro comercial, según el acuerdo de venta suscrito con el nuevo propietario, la empresa Mersan Assets Management, que reconvertirá el edificio en un complejo de oficinas.
Además, los establecimientos abocados al cierre en la primera tanda son: Arroyomolinos-Xanadú y Arapiles en Madrid, Guadalajara, Albacete, Ademuz (Valencia), El Capricho (Marbella), Marineda (A Coruña) y El Tiro (Murcia). Estos cierres podrían ejecutarse antes del final de este año 2020.
Además, la firma de grandes almacenes tiene otros planes en marcha, como la posible venta de varios centros de Hipercor a la competencia, especialmente Alcampo, con quien mantiene las conversaciones más avanzadas, pero también con Carrefour y E.Lecrec.
Esto también permitiría subrogar contratos y reducir el gasto en salarios sin enviar a los trabajadores al paro, muchos de ellos con gran antigüedad y altos costes de indemnización. De hecho, la firma ha reconocido que destruyó más de 1.700 puestos de trabajo en el año 2019, una cifra que ahora podría incrementarse por la caída dle consumo derivada de la pandemia.