El polémico CIS liderado por José Luis Tezanos ha dado con la clave. Su modo de palpar el clima de los electores había puesto en duda la credibilidad de unos sondeos que se sufragan con dinero público. Pero, ahora, se comprueba que esas críticas eran infundadas: el último macrosondeo ha sido el que ha acertado con mayor acierto todo lo que se avecinaba.
Y, seguramente, esto no guste en muchos ámbitos. Por ejemplo, el último sondeo de la segunda quincena de marzo, con 16.200 entrevistados, otorgaba al PSOE un 30% de los sufragios y entre 123 y 138 escaños. Consideraban que las expectativas estaban 'hinchadas'. Nada más lejos de la realidad: Sánchez se ha hecho con 123 escaños.
Lo mismo sucede con la espectacular debacle que ha vivido el Partido Popular de Pablo Casado. El CIS auguraba una horquilla entre 66 y 76 diputados. El resultado ha quedado finalmente en 66; 71 menos que en la anterior legislatura. Por poco, Tezanos se queda 'corto' en sus predicciones.
Por tanto, a pesar de que nadie creía posible que el PSOE pudiera llegar a doblar al PP en escaños, el CIS acertó, y de qué manera. Porque también se acercó sonadamente al número de diputados obtenido por Unidas Podemos, al que colocó entre los 33 y 41; y que finalmente ha obtenido 42.
El fallo llegó con Ciudadanos y VOX. El CIS pronosticaba para ambos un fuerte crecimiento, pero finalmente hubo 'pinchazo'. Los naranjas, por ejemplo, solo han subido seis escaños, frente al incremento de 10 que mencionaba el sondeo; aunque la realidad es muy dulce para Rivera: está a casi un punto de convertirse en la segunda fuerza política de España.
Por otro lado, el fenómeno de la ultraderecha no ha irrumpido con la fuerza imaginada. El CIS había asegurado que Abascal podía acceder al Congreso con un espectacular grupo de entre 29 y 37 diputados, lo que le habría situado a la par del recorrido con el que comenzaron sus socios europeos, esos que ahora ostentan puestos de responsabilidad en gobiernos y marcan la agenda política de sus países. Abascal está lejos de ello, aunque no hay que negar que 24 escaños es un resultado espectacular para quien no tenía ningún tipo de representación relevante hasta diciembre.
Giros en la estrategia
Con los datos sobre la mano, parece evidente que, a partir de ahora, todos los partidos tomarán con mayor seriedad esas encuestas del CIS de la que hacían mofa. Líderes como Rivera que pedían la dimisión de Tezanos o Casado que llegaba a calificar sus resultados como "malversación de fondos públicos".
Sin duda, la debilidad del centroderecha es evidente y las encuestas publicadas desde el CIS serán referencia. Porque el efecto de la Ley D'Hont está ahí y hay serias dificultades de que las tres derechas terminen unidas bajo las mismas siglas en plena guerra fraticida por erigirse como líder de su bloque.
Aún faltan tres semanas para que los españoles vuelvan a los colegios electorales para votar. Allí se juegan plazas territoriales como comunidades autónomas, municipios, pero también Europa y los cabildos.
Europa, el punto de batalla frente a un independentismo catalán que la derecha, según los resultados, no ha sabido combatir con eficacia. Porque el Senado no les deja margen, siquiera, para aprobar un 155 blando con su única iniciativa. Y todo ello, quizás, estaba señalado en el CIS de Tezanos.
