Nelson Mandela murió en diciembre de 2013, tras una vida de activismo. Tanto su muerte como su entierro fueron ampliamente televisados, así como todo el tiempo que había pasado en prisión anteriormente. Hasta aquí no hay nada misterioso, ni nada preocupante (aparte de la muerte de una gran persona, por supuesto). Lo extraño comienza cuando Fiona Broome, una mujer que ha dedicado su vida a estudiar los sucesos paranormales, aseguró en 2010 (es decir, tres años antes de la muerte de Mandela) que ella ya había vivido la muerte de Mandela; estaba totalmente convencida de que Mandela había muerto en prisión en la década de 1980.
Bueno, un despiste, diréis. Muchas veces, cuando llevamos un largo tiempo sin oír hablar de una celebridad, podemos llegar a creer que ha fallecido. No obstante, Broome aseguró que no era así. Ella recuerda cómo los medios de comunicación habían cubierto todo el acto funerario, recuerda todos y cada uno de los montajes fotográficos que se hicieron. Aquí señalaréis que puede que ella mezclara fechas, sin más, asociando lo que la prensa publicó en 2013 con lo que creía haber visto en 1980. Pero esto es imposible, porque cuando ella aseveró todo esto, era el año 2010. Mandela aún continuaba con vida.
Lo increíble fue cuando ella comenzó a publicar en internet sobre lo que denominó el Efecto Mandela, y descubrió que no era la única recordaba periodos de la historia de forma totalmente diferente a cómo habían sucedido. Por ejemplo, hubo quien aseguró que los manifestantes que desafiaron a los tanques en la Plaza de Tiananmen, en 1989, fueron atropellados por ellos. Pero esto no fue lo que pasó: los tanques se pararon, y no pudieron acceder a la plaza. A día de hoy, hay miles de personas que aseguran haber visto en televisión cómo esos tanques atropellaban a los manifestantes.
Fue así como nació el conocido ahora como Efecto Mandela. Según esto, todas las personas que recordaban que Mandela había fallecido en la cárcel provenían de universos paralelos donde esto realmente había sucedido, y el expresidente había fallecido, efectivamente, en la cárcel. Lo mismo sucedería con otros tantos ejemplos del efecto Mandela que se han dado hasta la realidad.
El último del que se ha hablado está relacionado con unos famosos dibujos animados, que seguramente habréis visto en televisión: los Looney Toons. ¿Os suena raro el nombre, o siempre lo habéis leído así? Su nombre original es Looney Tunes, y no Toons. Pero hay muchas personas que aseguran que antes se escribía Toons (haciendo referencia a cartoons, dibujos animados); no solo lo aseguran, sino que están total y completamente convencidos de que realmente siempre se ha escrito así.
Se han dado bastantes más casos que vendrían a confirmar, según aquellas personas que creen en el efecto Mandela, que existen universos paralelos y nos vamos moviendo entre ellos. La cuestión del asunto sería, a fin de cuentas, que no es que recordemos cosas distintas, sino que realmente hemos vivido circunstancias distintas, puesto que los sucesos han ido superponiéndose y, dependiendo del universo en el que estemos en ese momento, recordaremos las cosas de una forma o de otra. Curioso, ¿no?
Si sois seguidores de Star Wars, y habéis visto "El imperio contrataca", puede que recordéis como Darth Vader le dijo a Luke: "Luke, yo soy tu padre". ¿No? Pues no. Porque en ningún momento dijo el nombre de Luke, sino que se limitó a decir "yo soy tu padre". El actor confirmó posteriormente que el nombre de Luke sí que aparecía en el guión, pero él no quiso decirlo. ¿Será que en un universo paralelo sí que lo dijo? Solo así se explicaría, según los seguidores del Efecto Mandela, que haya miles de personas que aseguran haber oído el nombre en la película.
Se han realizado muchas investigaciones respecto a este llamado Efecto Mandela, y se ha llegado a la conclusión de que las personas que suelen tener estas sensaciones son, por lo general, las nacidas entre 1955 y 1980. Además, hay quien asegura que todo esto tiene una explicación física, puesto que, según ellos, la conciencia puede viajar a través de los distintos universos paralelos que existen; así, las personas cuya conciencia se encuentra viajando, recordarán los sucesos de forma distinta a como en realidad fueron.
No obstante, también hay una gran cantidad de personas (en su mayoría, científicos y expertos) que señalan que todo esto del Efecto Mandela no es más que pequeñas confusiones que se alojan en el cerebro de las personas. De esta forma, no es que Broome recuerde la muerte de Mandela porque esta haya sucedido, sino que estará asociando otra muerte que se diera en esas condiciones (una persona importante que falleciera en la cárcel) con la imagen de Mandela; o, simplemente, que su mente ha creado un recuerdo donde no había nada en un principio.
¿Qué creéis vosotros? ¿Existen los universos paralelos, y nuestra conciencia puede ir viajando entre ellos sin ningún tipo de problema? ¿O esto no es más que otra teoría conspiratoria?