Sí o sí. En Alemania, la responsabilidad de proporcionar educación sexual a menores no es un papel exclusivo de la familia, sino un deber del Estado. Desde la primaria, los alumnos comienzan a recibir información sobre la educación sexual de manera obligatoria en los 16 estados federados que componen el país bávaro.
Para ello, el plan de formación a este respecto está basado en un catálogo educativo vigente a nivel nacional. La Central Federal de Educación en Materia de Salud (BZgA por sus siglas en alemán), es un organismo creado en 2003 en Alemania como centro especializado de la Organización Mundial de la Salud. Se trata de la principal responsable de implementar las directrices, cuya base se guía por su documento 'Patrones para la Educación Sexual en Europa'.
Antes de que se impartan los temas específicos de educación sexual, los padres y madres son informados con antelación, sin embargo, no tienen derecho a decidir de manera directa si sus hijos o hijas deben o no acudir a dichas clases. Interferir en este proceso puede suponer una sanción económica e incluso la cárcel, ya que la no asistencia a dichas clases sin haber completado la educación obligatoria es ilegal.
La educación sexual como derecho
Además de enseñar acerca de aspectos biológicos y métodos de barrera que eviten enfermedades de transmisión sexual o embarazos, se tratan temas como la igualdad de género, valores sociales, y las emociones relacionadas con la sexualidad y las relaciones interpersonales. La educación sexual es un derecho. Es por eso que en la mayoría de los estados federados está integrada en otras materias como ética, biología, religión y ciencias sociales. En otros, también hay materias específicas de educación sexual.
El índice de uso de la píldora anticonceptiva y el preservativo en Alemania son altos, lo que contribuye a que haya niveles relativamente bajos de embarazo adolescente en el país. Por otro lado, siendo algo menos mediático pero igual de importante, cuanto mejor sea la educación sobre el sexo, menor es la probabilidad de contraer enfermedades o infecciones sexuales transmisibles.
Asegurar la salud mental y física de los futuros jóvenes
Este sistema educativo colisiona directamente en España con la idea del veto parental de VOX. Mientras la ultraderecha española se lleva las manos a la cabeza por que las niñas y niños adquieran conocimientos adaptados sobre la sexualidad y el sexo de cara a su salud y libertad de decisión futura, Alemania ha decidido impartirlos sin excepción.
Para la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), la educación sexual es un tema urgente en las escuelas y de ninguna manera incentiva el comportamiento sexual de riesgo, como muchos que intentan hacer política de esto afirman. Por el contrario, los futuros jóvenes tendrán más responsabilidad sobre su salud sexual y reproductiva.