VOX recrudece su cruzada contra el colectivo LGTBI. Los pactos de Gobierno alcanzados con el PP tras las elecciones autonómicas y municipales del pasado 28 de mayo han dado fuerza al partido de extrema derecha que ha comenzado por exigir la eliminación de cualquier bandera arcoíris de edificios públicos en pleno mes del Orgullo LGTBI.
El último ejemplo lo hemos vivido en Mérida, donde además ha tenido lugar una perversa comparativa cuyo objetivo es criminalizar al colectivo LGTBI tal y como se hacía en siglos pasados.
Francisco Piñol, concejal ultra de la capital extremeña, ha exigido la retirada de la bandera arcoíris de la fachada del Ayuntamiento porque, a su juicio, no se cumple una sentencia del Tribunal Supremo "y lo que marca la Constitución".
"Si nos seguimos saltando la ley, lo siguiente que vamos a ver es la bandera de los pedófilos y vuestros hijos y mis nietos pueden estar metidos en eso", ha lanzado en el pleno, solicitando a la secretaria municipal un informe escrito sobre la aplicación de la ley de banderas en las instituciones.
Un concejal de Vox en Mérida sobre la ??????????, un posible delito de odio:
— Diego FS ???? (@DiegoFSRB) June 29, 2023
"Cualquier día veremos la bandera de los pedófilos". pic.twitter.com/hMhQKyUNyB
El alcalde socialista Antonio Rodríguez Osuna ha tenido que explicar que el ayuntamiento cumple la ley porque la bandera no ocupa la fachada principal del edificio y, además, no se sustituyen las oficiales de Europa, España y Extremadura. Ha recordado además que en la fachada del Ayuntamiento se cuelgan todo tipo de banderolas que tienen que ver con las celebraciones que se viven en la ciudad, desde el Día del Alzhéimer, al Festival Internacional de Teatro Clásico o a la Semana Santa
Rodríguez Osuna ha acusado a los representes de VOX de "tergiversar" una sentencia del Tribunal Supremo en ese sentido, que lo que plantea es que no se pueden sustituir las banderas institucionales en edificios públicos. El alcalde de Mérida ha precisado que en el Ayuntamiento están colgadas siempre las banderas tal y como establece la ley, "aunque muchos no creen en Europa ni en las comunidades autónomas", ha concluido en alusión a la formación de extrema derecha.
También en Badajoz
Mérida no es el único lugar de Extremadura donde VOX trata de pisar al colectivo LGTBI. En Badajoz han pedido a su alcalde, el popular Ignacio Gragera, "la retirada inmediata de la iluminación con los colores que simbolizan al colectivo LGTBI de la fachada del Ayuntamiento".
Según el escrito del partido ultra, "estos símbolos carecen de reconocimiento legal válido en ninguna administración territorial", y "por tanto sólo pueden ser calificados de parciales y electoralistas, por lo que no representan a la mayoría de los ciudadanos, ni siquiera a todas las personas homosexuales, ya que muchas de ellas rechazan ser colectivizadas y utilizadas como arma política".
VOX lo califica como "simbología del lobby LGTBI" y manifiesta que esas asociaciones "reciben millones de euros públicos" y solo buscan ganar poder y recibir subvenciones "a costa del enfrentamiento social".
