La dueña de Zara, la multinacional Inditex, se encuentra en pleno proceso de reconversión de su modelo de negocio para adaptarse a las nuevas tendencias del mercado. De este modo, apuesta por clausurar establecimientos físicos y potenciar el canal online, en competencia con firmas como Amazon, Shein o Zalando.
Estos movimientos siguen el camino emprendido por firmas de la competencia como El Corte Inglés, Sfera o H&M, que están priorizando menos locales pero con un formato más experiencial y en puntos turísticos, enfocados en dar a conocer su stock para su posterior compra por internet.
De este modo, la gallega Inditex, dueña de marcas relevantes como Zara, Bershka, Pull&Bear, Massimo Dutti, Zara Home, Oysho o Stradivarius no se mantiene al margen y también está reduciendo su superficie comercial para adaptarse al giro emprendido en el sector del retail.
Adiós Zara e Inditex: la empresa desaparece de esta importante ciudad
En el marco de esta política, la multinacional Inditex ha anunciado el cierre de su histórica tienda de Stradivarius en pleno centro de Torrelavega (Cantabria), capital del Besaya. Este movimiento responde a una oleada de cierres que ha terminado en la desaparición de la multinacional de esta ciudad.
Los movimientos comenzaron en noviembre de 2018, cuando Inditex anunció el cierre de Bershka, y continuaron en enero de 2022, cuando también clausuró definitivamente la tienda de Zara, su buque insignia, que desapareció de la ciudad.
De este modo, la única firma de Inditex que quedaba hasta ahora en sus calles era Stradivarius. La multinacional cerrará el negocio en las próximas semanas, y se ha apuntado inicialmente al 26 de febrero como último día en que la tienda permanecerá operativa, según publica el medio local Radio Studio.
Los trabajadores ya han recibido la notificación de cierre del negocio. Además, el portal Idealista ya anuncia el alquiler de este importante local, que se ubica en la calle Serafín Escalante, 8, en Torrelavega (Cantabria). Se trata de un local de más de 400 metros cuadrados, que se reparten entre 310 de la planta baja y 100 de la primera planta, anunciado por 12.000 euros mensuales.
El cierre de Inditex en Torrelavega evidencia las intenciones de la multinacional por eliminar su presencia en ciudades de tamaño medio y potenciar la venta online. La firma sigue de este modo los pasos de empresas de la competencia, como El Corte Inglés, Sfera, Benetton o H&M, para adaptarse a las nuevas tendencias del mercado.
