La cantante Becky G, de 22 años, publicaba recientemente un vídeo en sus stories de Instagram en el que podía ver una vía inyectada en su brazo. Sin embargo, no se trata de ningún problema de salud ni ingreso hospitalario. Al contrario, la cantante se econtraba en su propia casa realizándose el último tratamiento de belleza que causa furor entre las celebridades.
Se trata de un tratamiento intravenoso por goteo conocido como Dripology que consiste, según describen en la web de la empresa, en una fórmula de nutrientes y suplementos que expulsan las toxinas y rejuvenecen el aspecto de la piel, el pelo y las uñas. Esta milagrosa combinación la ha popularizado la maquilladora Ash K Holm, que ha trabajado con estrellas como las hermanas Kardashian o la cantante Camila Cabello.
Sin embargo este método "milagroso" ha generado una gran controversia debido a sus posibles riesgos y su dudosa efectividad. Y es que los humanos podríamos no estar preparados para recibir los nutrientes de esta forma que parece, en principio, tan sencilla. Así lo ha advertido el doctor David Katz: "Estamos diseñados para obtener nutrientes a través del tracto digestivo y así es como deberíamos hacerlo", asegura.
El método de las influencers
El método no es el más saludable, pero existen además otros aspectos de esta práctica que hacen que suponga un verdadero peligro para la salud, como el hecho de que los clientes puedan aplicarse el tratamiento desde sus propias casas, manipulando herramientas médicas sin disponer de los conocimientos o la cualificación necesaria para ello. Por estas razones, métodos como el utilizado por la conocida cantante Becky G, son altamente peligrosos y los expertos lo desaconsejan de forma constante.
Sin embargo, a pesar de los múltiples riesgos que entraña la técnica conocida como Dripology, cada vez son más las estrellas internacionales que se suman a esta nueva moda: la influencer Liza Lash o el matrimonio de youtubers Desi y Steven Perkins son algunas de las celebridades que ya se han sumado a aplicar esta tendencia y compartirla con sus seguidores en las redes sociales.
De hecho, el método cuanta ya con su propia cuenta de Instagram en la que podemos ver a infinidad de famosos aplicándose el tratamiento, como la maquilladora Chiristina Sikalias y su novio Mark Abdelmalik, que decidieron hacerlo en pareja.
Además de mostrar a sus nuevos clientes, la cuenta de Dripology ofrece también información respecto al tratamiento: cada sesión tiene un coste de 399 dólares y se puede realizar en el domicilio del cliente, según señalan desde la empresa, de una manera "discreta, profesional y eficiente". Sin embargo, los expertos han advertido ya de todo lo contrario.